La avenida Cataluña se reinventa a golpe de cemento y ladrillo

"La avenida Cataluña de Zaragoza ha cambiado más en dos años que en los últimos 50», dice un histórico vecino de este zaragozano barrio, Jesús Fon, que ha visto cómo se han ido yendo poco a poco las viejas empresas de esta eterna carretera nacional que el Ministerio de Fomento no cedió hasta 2019. Era el primer paso para que el ayuntamiento iniciará los trabajos de reconversión, esenciales para motivar la construcción de nuevas urbanizaciones, con edificios modernos y Passivhaus, con grandes balcones y piscina comunitaria. Todo un lujo que permitirá la llegada al barrio de nuevos vecinos en los próximos años aunque con un pero, y es que las nuevas se concentran en un mismo punto, junto a la Ronda Hispanidad, rodeando el convento de las Carmelitas Descalzas de San José.

Actualmente hay tres en construcción, dos libres de 135 y 64 pisos y otra de vivienda protegida, con 36 apartamentos. «Como se diría, es la primera piedra de lo que puede ser esta zona de la ciudad consolidada», explica el presidente de la patronal de la construcción de Aragón, Juan Carlos Bandrés.

«Al final, la cosa es quejarse»

La urbanización de uno de los tramos de este vial, entre la Z-30 y la calle Veintitrés de Abril, junto al puente del ferrocarril, ha sido el pistoletazo de salida. El impulso que necesitaba esta cicatriz urbana para resurgir. «Ha sido un acierto» , matiza Bandrés, que calcula que en dos habrá más de 300 viviendas nuevas en el mercado. El consistorio ha invertido en esta primera fase 4,4 millones y destinará 1,2 en la segunda, cuando se construirá una rotonda a la altura del puente del ferrocarril.

Interés por comprar

«El mejor termómetro que tenemos para saber si una zona resulta atractiva es el volumen y el ritmo de ventas, y hemos comprobado que hay interés», explica Bandrés, también Director General de Grupo Lobe, constructora que está construyendo ahora una urbanización con 135 viviendas libres que hará entrega de sus llaves en octubre de 2024.

«Hay que conseguir que se vea la avenida Cataluña como ciudad consolidada. Zaragoza, por tendencia, ha crecido siempre hacía el sur y esta zona tiene muchas posibilidades», insiste Bandrés.

Para los vecinos, las obras que está ejecutando el ayuntamiento son clave. «Ahora que va a tener carril bici, zonas ajardinadas, juegos infantiles y grandes aceras va a mostrar otra cara y va a resultar mucho más atractiva», señala Juan Andrés, de la Asociación de Vecinos La Jota. «La gente se dará cuenta de que los edificios están bien y además a un precio más económico que en otra parte de la ciudad, así que es cuestión de tiempo que esta avenida se convierta en lo que merece ser», subraya.

«La zona de avenida Cataluña, en plena remodelación, cuenta con todos los servicios, centros de salud (Grande Covián), colegios, centros comerciales, supermercados. Una bonita zona en expansión de Zaragoza con accesos inmediatos a la Z-30 y Z-40». Así venden las promotoras en sus portales digitales.

Los precios de las viviendas

El precio de las viviendas libres oscila entre los 200.000 y los 280.000 euros de los áticos, terraza y garaje incluido, además de los servicios que incluyen, con espacios comunes en los que destacan las zonas ajardinadas, los juegos infantiles y las piscinas.

Para los promotores es una mina a explotar, con suelos urbanizables pendientes de ser reordenados en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU). Uno de los problemas a los que se enfrentan las constructoras es burocrático, administrativo. Este tramo de la avenida Cataluña albergó en su día a múltiples empresas en unos años en los que la normativa no estaba pensada para cuidar el medio ambiente. Ahora, las constructoras deben hacer frente a la descontaminación de estos suelos y es en esta primera fase, en la redacción de los proyectos de descontaminación y su ejecución, en la que se encuentran con más trabas administrativas.