Movilidad urbana

Tarjeta física vs. tarjeta digital: Los zaragozanos se resisten a pagar el bus con el móvil

Aunque cada vez son más los que utilizan la app, solo un 1% de las validaciones son ‘online’

Al mes se compran 3.700 billetes virtuales y se registran 56.800 usos con la tarjeta digital

La aplicación móvil permite seleccionar distintos modos de pago, ya sea con la compra de un billete sencillo o a través de la tarjeta virtual.   | ÁNGEL DE CASTRO

La aplicación móvil permite seleccionar distintos modos de pago, ya sea con la compra de un billete sencillo o a través de la tarjeta virtual. | ÁNGEL DE CASTRO / carlota gomar

Carlota Gomar

Carlota Gomar

Los zaragozanos se resisten a pagar sus viajes en bus con el teléfono móvil. La digitalización de la famosa tarjeta roja desembarcó en la capital el pasado mes de diciembre y desde entonces su uso no ha parado de crecer. Sin embargo, sigue representando un porcentaje mínimo del total de las operación. Solo el 1% de las validaciones mensuales se hacen a través de la app del smartphone.

Siete meses después de su puesta en marcha los resultados se infieren satisfactorios porque el crecimiento ha sido sostenido y progresivo. Según los datos facilitados por Avanza, las validaciones digitales han pasado de sumar 9.818 en su primer mes (diciembre) a 56.875 en junio.

Por ahora, esta tarjeta solo puede utilizarse en los autobuses, no en el tranvía, que todavía tiene que subirse al carro de la digitalización y adecuar sus máquinas validadoras. Solo entonces, la virtualización de este plástico se extenderá al resto de abonos y títulos de transporte y será entonces cuando se produzca un cambio importante en los hábitos de los zaragozanos.

Utilizar la tarjeta virtual es muy sencillo. Solo hay que descargarse la aplicación móvil de Avanza y recargarla. Cada vez que se utiliza se genera un codigo QR de acuerdo con el tipo de viaje y cantidad de personas que vayan a acceder. La app incluye los mismos descuentos de los que disfruta el usuario con su tarjeta física. Es decir, a día de hoy se aplicaría la bonificación del 50% en cada viaje. Un descuento que, por cierto, se ha prorrogado hasta final de año.

Yendo a los datos. Las estadísticas apuntan a un incremento del uso del móvil progresivo, lo que indica que los usuarios, poco a poco, van conociendo esta alternativa, mucho más sostenible y cómoda.

La evolución de las validaciones con la tarjeta digital

Según los datos de Avanza, en diciembre de 2022 se registraron 9.818 usos de la tarjeta digital. Tan solo un mes después ya fueron 28.801 los viajes abonados con la app. 36.219 se alcanzaron en febrero y 46.366 en marzo. Un crecimiento «sostenido» que alcanzó su pico en junio, con 56.875 validaciones

Una mujer recarga su tarjeta en una máquina de la parada del tranvía.  | ÁNGEL DE CASTRO

Una mujer recarga su tarjeta en una máquina de la parada del tranvía. | ÁNGEL DE CASTRO / carlota gomar

En su proceso de digitalización Avanza también ofrece la posibilidad de comprar el billete sencillo a través de la aplicación móvil. En este caso, el usuario no se beneficia de descuento alguno, como ocurre en las máquinas expendedoras por lo que el precio del viaje es de 1,50 euros.

Aún así, cada vez son más los que eligen esta opción. El billete sencillo digital se puso en marcha en octubre de 2020, un año marcado por la pandemia y la caída de usuarios. Tras un inicio con unos números discretos, el año 2022 cerró con 39.879 títulos sencillos comprados a través de smartphone. En los primeros seis meses de este año ya se han vendido 20.447. De media, se compran con el móvil 113 billetes al día, alrededor de 3.700 al mes.

La aplicación móvil, además, permite consultar paradas y horarios de paso, obtener información sobre los recorridos y posibles alteraciones en las líneas.

Esta digitalización solo afecta a los autobuses, no al tranvía, que trabaja en la adecuación de sus sistemas para poder ofrecer este servicio a los usuarios. Hay que tener en cuenta que la red del autobús urbano está diseñada en paralelo a la línea 1 del tranvía, por lo que los recorridos incluyen transbordos en el Urbos 3, una opción que a día de hoy no es viable.

Por ahora no hay fecha para esta digitalización del tranvía que tendrá que llegar antes de la futura reordenación de líneas del autobús urbano que preparan desde el Gobierno del PP y que, no obstante, no se producirá este 2023, sino que habrá que esperar al primer semestre para ver el primero de los cambios que quiere aplicar. Será con la introducción de una línea circular que unirá el este y oeste de la capital.