Cuenta atrás para cerrar la última cicatriz urbana del Picarral: "Le dará vida al barrio"

Parece que el Picarral va a revitalizarse. Por fin. Después de 21 años, la explanada abandonada que pertenece a la antigua factoría de Aceralia va a llenar su vacío. Se trata de unos suelos que, hasta ahora, no incluían más que suciedad y objetos viejos. Ya no más: el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) recoge la creación de 850 viviendas, algunas de ellas de protección oficial, además de zonas verdes.

Los vecinos llevan mucho tiempo esperando esta construcción en los terrenos. Miguel Allué es el presidente de la asociación de vecinos de Zalfonada-Caitasa (barrio del Picarral), y afirma: “Necesitamos que el plan se inicie ya, que no sean palabras que se queden en el olvido. Durante este tiempo han dado prioridad al sur y se ha descompensado la ciudad”. En el barrio requieren espacios verdes, viviendas de protección social y “otros muchos equipamientos”, explica Allué.

850 viviendas permitirán cerrar la cicatriz de los suelos de Aceralia en El Picarral, Zaragoza

A la voz de Allué se suma la de otros ciudadanos del Picarral. Una es la de Antonio. Se mudó allí hace seis años, y considera que “generar nueva vivienda va a revitalizarlo”. Otro tema son los precios. La nueva construcción puede generar una subida de los alquileres, una revalorización de la zona que, aunque es positiva por un lado, puede llevar a que aumenten más de lo que ya lo han hecho. “Yo ahora podría vender mi piso por el doble de lo que me lo compré”, comenta Antonio.

Otra de las grandes demandas ciudadanas, y que por suerte se recoge en el PGOU, son los espacios verdes. Unas zonas que, además, van a separar la franja urbana de la fábrica Saica. Lo cuenta Laura, vecina del barrio: “Que hagan parques me parece muy bien. Y su ubicación también. Lugares verdes es lo que más necesario veo”. Carlos, que se mudó a la zona con su familia hace apenas cinco meses, coincide con ella: “Si algo hemos echado en falta es algún parque más”.

Más allá de las viviendas

Pero no solo es eso. El proyecto es un buen comienzo, pero los vecinos necesitan que vaya más allá. Más avances. Más ayudas. Antonio, carnicero de Montori-Barranco, vive en el Picarral desde hace 30 años, y opina que "además de la construcción, la gente necesita otros servicios. En el hospital Royo Villanova, por ejemplo, ya casi no caben hospitalizados”.

Y es que desde hace algunos meses, ya no es solo una zona abandonada.“Este espacio lleva tiempo generando problemas, temas de drogas, vertidos y otras muchas cosas… Hay que tomar el tema en serio”, especifica Miguel Allué. Y añade que "este tiempo se ha estado desfigurando el urbanismo en general". Piden un cambio. Y lo piden para ya.

Así que, por fin, Saica, una de las grandes opositoras al plan de construcción hace años, ha dado su beneplácito. Y, por fin, se llevará a cabo el proyecto. Se construirán nuevas viviendas y los grandes terrenos de Aceralia dejarán de ser un lugar abandonado que, desde luego, no generaba más que incertidumbre.

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