O iba de farol o fue un calentón. La decisión de equipo de gobierno PSOE-PAR de celebrar Expo Paisajes 2014 en el meandro de Ranillas se ha volatilizado en apenas cinco días. Ahora volverá a hacerse en la desembocadura del Gállego, a medio camino entre Vadorrey y Las Fuentes. Al menos, de momento. El alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, dio ayer un nuevo golpe de timón y afirmó que la muestra internacional se hará en la orla Este de la ciudad porque ese era su sentido original. Ya no hay consenso ni minorías políticas que valgan.

¿Cómo? Ganando tiempo. Belloch, arropado por los pesos pesados de su Gobierno, anunció ayer que ha negociado con el Bureau Internacional de Exposiciones (BIE) para que la presentación de la candidatura en París y la consecución de la máxima categoría que permita obtener fondos extra del Estado se posponga hasta junio del 2011. O lo que es lo mismo, un mes después de las próximas elecciones municipales. PSOE y PAR tienen claro que si consiguen mayoría --y reeditan el pacto-- apostarán por esta ubicación y deja ahora la pelota en el tejado de la oposición para definir posiciones de cara al próximo mandato.

MIEDOS OLVIDADOS

El temor a no llegar a tiempo que imperaba tras el debate del estado de la ciudad y que llevó al vicealcalde Fernando Gimeno a apostar por el meandro de Ranillas como única salida viable ya no cuenta. Tampoco la necesidad de comenzar las plantaciones a finales del 2010. Ahora se planificarán en viveros y se plantarán sí o sí en la zona reservada para el futuro recinto. Y todos en el Gobierno se han olvidado de que la apuesta de Ranillas era más barata --50 millones frente a los casi 180 del Gállego-- y no necesitaba recalificaciones urbanísticas.

El primer edil reconoció que no se puede sacar adelante el proyecto de la desembocadura del Gállego si no es con recalificaciones urbanísticas. "Usar las plusvalías para beneficios de los barrios es lo más sensato y lo más obvio", reconoció. El proyecto que manejan PSOE y PAR aboga por pagar la muestra con 5.000 viviendas, la mitad de las planificadas en la primera opción ubicada íntegramente en Las Fuentes.

CAMBIO

El alcalde justificó su cambio de opinión porque no quiere pasar a la historia como el regidor que ha contribuido al desequilibrio futuro de Zaragoza. Aboga por compensar el crecimiento del Este y del Oeste. Eso sí, aprovechó para arremeter contra el PP al recordar que no pasa por repetir errores como los que cometieron los conservadores al ubicar la estación del AVE en Delicias.

Pero este viraje en el camino hasta el 2014 no llegó solo. Juan Alberto Belloch aprovechó para explicar que negociará con el Ministerio de Medio Ambiente y el Gobierno de Aragón un segundo plan de riberas que permita extender la reforma emprendida con motivo del 2008 hasta La Alfranca, el soto de Cantalobos y la desembocadura del Gállego. Y por si esto fuera poco ordenó al teniente de alcalde de Urbanismo, Carlos Pérez Anadón, que inicie "el procedimiento administrativo" para impulsar la transformación urbanística de la orla Este teniendo en cuenta las conclusiones del Colegio de Arquitectos y las demandas vecinales.

Para estas dos últimas decisiones no dio plazos ni aclaró financiación alguna. "No es el momento de concretar", reconoció públicamente. También admitió que estas órdenes no se verán reflejadas en los presupuestos municipales del 2010 ni en los del Estado o los del Ejecutivo autonómico. "Hay un año de papeleo por delante", espetó.

Belloch acusó a PP y CHA de tener un comportamiento electoralista por negarse a pactar el futuro de la Expo y justificó "por coherencia" la actitud de su apoyo puntual más válido, Izquierda Unida. Se olvidó de que él mismo ha dejado el futuro de la Expo 2014 en manos de los electores. Seguro que continuará.