Carlos Álvarez (PSOE), coordinador de la ponencia en la que se han analizado las casi 260 enmiendas presentadas por los grupos, de las que han sido aceptadas 139, ha destacado que la ley lleva "el sello del consenso", algo que han rechazado el resto de portavoces, quienes han señalado a Efe que las que cada uno consideraba de más enjundia no han sido aceptadas.

Álvarez ha insistido en que todos los grupos han hecho un esfuerzo "muy importante" para llegar al mayor número de acuerdos posible y ha afirmado que después del trabajo en ponencia se mantiene el espíritu inicial de la proposición socialista, que apostaba por la no cooficialidad, por la voluntariedad en el uso y la enseñanza y por la territorialidad. En este sentido, ha dicho que no se ha aceptado ninguna enmienda que no respetara estos principios, pero tampoco las que rechazaban la denominación de catalán y aragonés para las lenguas propias. Se ha mostrado "convencido" de que en la votación final de la ley, en el pleno que celebrarán las Cortes el 17 de diciembre, "todos los artículos saldrán adelante", porque "todos y cada uno tendrán la mayoría necesaria para ser aprobados".

El portavoz de CHA, Chesús Bernal, por su parte, se ha mostrado "bastante satisfecho" con el trámite de la ley porque ésta, ha dicho, "ha mejorado mucho" con las enmiendas de CHA aceptadas (80 de 110). Sin llegar a lo que pretendía, ha añadido, la proposición supone ahora un "punto de partida fundamental" para la política lingüística en Aragón, "única Comunidad autónoma con lenguas propias que carecía de una ley hasta ahora". Sin CHA no hubiera habido ley, ha insistido Bernal, quien ha recalcado que la proposición socialista mejora con algunos aspectos "fundamentales" propuestos por su partido, como la relación de los ciudadanos con las administraciones, los medios de comunicación social o la educación.

Además, ha reconocido, aunque no se han aceptado las propuestas directamente relacionadas con la cooficialidad, sí que se introducen aspectos que tienen que ver con ello, como la posibilidad de que los ciudadanos se dirijan a sus administraciones en aragonés o en catalán. El acuerdo del PSOE con CHA implica que no ha sido posible alcanzarlo con su socio de Gobierno, el PAR, cuya portavoz, María Herrero, ha dicho a EFE que varias de las enmiendas que los aragonesistas consideraban más importantes no han sido aceptadas, como las relacionadas con la denominación de las lenguas propias (no acepta el término catalán) o con la declaración de zonas predominantes. Ha reconocido que se han aceptado "varias" enmiendas, pero no las más importantes, con lo que el texto que se votará el 17 de diciembre, ha dicho, está más alejado de la postura del PAR que el texto de la proposición de ley cuyo trámite se tomó en consideración, y por eso probablemente votará en contra.

El diputado del PP Miguel Navarro ha dicho, por su parte, que en la negociación en la ponencia se ha sentido "el convidado de piedra", puesto que su postura dista mucho de la incluida en la proposición de ley y en las enmiendas del resto de grupos. Ha asegurado que ésta no es la ley que quiere la sociedad aragonesa, ha insistido en que se ha creado "una pequeña barbaridad" y ha añadido que si la proposición de ley original no recogía la realidad lingüística de Aragón, con la incorporación de las enmiendas de CHA aún está "mucho más lejos" de esta realidad.

El diputado de IU, Adolfo Barrena, ha asegurado a EFE, por su parte, que de la ponencia ha salido una ley que es "a todas luces insuficiente" y por ello "no la va a apoyar en absoluto". Supone, ha dicho, un "retroceso profundo" respecto al dictámen sobre Política Lingüística que aprobaron las Cortes en 1997. A su juicio, el texto es "profundamente decepcionante" y "en absoluto" está comprometida con la realidad trilingüe de Aragón, al tiempo que no garantiza los derechos de los hablantes.Las enmiendas aceptadas a IU son "de carácter menor", pero no las que tienen que ver con la cooficialidad, la obligatoriedad de la enseñanza o el "compromiso firme" de poner en marcha una "ley de derechos".