Los pequeños repuntes que protagoniza el río y la rotura de una mota en Fuentes, que no ha sido posible reparar, están detrás de que ayer tuviera que cortarse por segunda vez en pocos días la A-1107, que cruza el Ebro por Pina y une la N-232 y la N-II. El agua volvió a cubrir la vía, y conductores y líneas de autobús tuvieron que hacer uso de la ARA-A1.