El Ministerio de Economía y Competitividad ha desmentido "rotundamente" que Bankia haya sido intervenida, y precisa que se ha producido un cambio en la presidencia de la entidad que ocupaba Rodrigo Rato. El departamento que dirige Luis de Guindos indica en un comunicado oficial que a partir de ahora, el objetivo es ejecutar un plan de saneamiento, reestructuración y mejora del gobierno corporativo de la entidad que garantice su viabilidad futura.
El nuevo equipo de gestión deberá presentar sus planes al Banco de España por los cauces normales. "El Gobierno apoyará a la entidad, en todo lo que sea necesario, para la consecución de estos objetivos", sostiene.
La cotización del Bankia sigue castigada en la bolsa española, la entidad pierde más del 5% de su valor a media mañana. El banco envió ayer una comunicación a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) en la que se daba cuenta de la dimisión de Rodrigo Rato, presidente hasta que haga efecitva esa dimisión el próximo viernes y sea sustituido por José Ignacio Goirigolzarri.
La razón de no suspender la cotización
Con esa comunicación -además de las cuentas presentadas la semana pasada, sin auditar-, la CNMV da por informado al mercado de cuál es la situación de la entidad, razón por la cual no ha suspedido su cotización.
En medios financieros se considera que la única información que en este momento no tiene el mercado es cómo se resolverá definitivamente la inyección de recursos que necesita Bankia, así como otras entidades, para hacer frente a los activos tóxicos derivados del ladrillo, que se acercan a los 32.000 millones de euros. Está previsto que el próximo viernes el Consejo de Ministros debe aprobar la regulación de las sociedades desconsolidadas, equivalentes a bancos malos.
