Los presidentes de los tres principales bancos españoles --Emilio Botín, del Santander; Francisco González, del BBVA, e Isidro Fainé, de CaixaBank- presionaron al ministro de Economía, Luis de Guindos, para que el Gobierno adoptara medidas sobre Bankia, la cuarta entidad del país. Los tres banqueros se reunieron a última hora del viernes, convocados por el ministro, ante la presión de los organismos internacionales y los mercados, según publican hoy los diarios Expansión y El Mundo.

En la reunión, Botín, González y Fainé se quejaron de que los bancos más saneados se están viendo perjudicados por las entidades más expuestas a los riesgos del ladrillo, ya que los inversores no hacen distinción entre unos y otros.

La reunión concluyó con el consenso entre los asistentes de que la búsqueda de una solución para Bankia era urgente. Ayer mismo, Rodrigo Rato anunció su dimisión como presidente de Bankia y propuso como sucesor a José Ignacio Goirigolzarri tras hacerse público que Economía tomará las riendas de la entidad, que necesitará entre 5.000 y 10.000 millones de las arcas públicas.