--¿Cómo ha ido la campaña? ¿Ve a la ciudadanía movilizada para votar?

--Los progresistas están más movilizados ahora que cuando empezó la campaña. La gente de izquierdas es más consciente que nunca de la realidad que nos jugamos el domingo. Ha quedado manifiestamente claro quién es Pérez Rubalcaba y quién es el ambiguo de Rajoy. Ambos han podido explicar sus propuestas para el futuro de este país y la gente ve con absoluta claridad que el primero tiene claro el proyecto para España y a Rajoy aún le estamos esperando .

--Hablaban de que hay un 30% de indecisos. ¿Han conseguido atraer parte de ese porcentaje?

--Estoy convencida de que se moverá. A pesar de todo, el porcentaje de indecisos sigue siendo alto y además es de votantes nuestros. Espero que aún podamos moverlo más en lo poco que queda de campaña.

--¿Cómo valora que todo indique que van a obtener unos resultados muy desfavorables?

--Somos conscientes de que la situación es compleja. A los gobiernos que les está tocando lidiar con esta crisis mundial les está pasando factura, y España no es una isla independiente. Pero siempre digo que los socialistas nacimos para vencer la adversidad y ahora tenemos este nuevo reto, aunque sea una situación muy complicada. Pelearemos para revertir esta situación y acabar cuanto antes con esta crisis, todos juntos.

--Han basado parte de su campaña en defender al PSOE como garante de los logros sociales. ¿Realmente cree que con el PP corren peligro?

--Este país tiene historia. Está demostrado que en 22 años de gobierno socialista y en ocho del PP, se puede comparar lo que ha pasado en cada momento. Nosotros pusimos en marcha todo este estado de bienestar y convertimos en derecho la educación, la sanidad, las pensiones y la dependencia y el PP en sus ocho años jamás aprobó un derecho social. Ahora que gobierna en la mayoría de comunidades, vemos cómo está recortando derechos en todas las comunidades.

--¿Pero el PP lamenta que durante su gobierno se ha llegado a los cinco millones de euros?

--El problema de este país con esta crisis económica es que ha habido una burbuja inmobiliaria que cuando ha pinchado ha provocado una pérdida de más de dos millones de empleos. Es verdad que los socialistas tardamos un poco en pincharla, pero la generó el PP con su Ley del Suelo. Por tanto, escudarse en las cifras del desempleo es un arma manida que ellos emplean. Y nada tiene que ver la situación que vive ahora este país a la que se encontraron ellos en el 96, cuando ya se salía de la crisis.

--¿Un cambio de gobierno con nuevas ideas podría aliviar esta crisis?

--Al ser una crisis mundial, vamos a necesitar soluciones supranacionales. Se necesitan medidas de mucho calado. O salimos entre todos o no salimos. Es una falacia decir que con un cambio de gobierno se sale de la crisis. Basta con ver Portugal, que cambió de gobierno y ahora están peor los pensionistas, a los que se les han quitado dos pagas extras. Hay que tomar medidas y las que hemos tomado en España no tienen nada que ver en su dureza con las tomadas en Irlanda, Grecia o Italia.

--En su campaña han anunciado medidas fiscales e impositivas que afectan a rentas más altas. ¿Por qué?

--Es fundamental. Las medidas que tomamos en mayo del 2010 eran duras y considerábamos que había que repartir los esfuerzos, pero ahora ha llegado el momento de que aporten más los que más tienen. En España hay grandes fortunas y consideramos fundamental que esas personas que seguramente ni han notado que hay crisis ayuden a salir de ella. Y con eso podemos crear empleo en algunos sectores que se han resentido mucho por la crisis, como los jóvenes.

--¿Por qué ahora?

--Ya adoptamos alguna medida en su día. Una de las iniciativas que pusimos en marcha, por ejemplo, fue cambiar la política impositiva de las Sicav y otras medidas similares. Pero ahora la crisis sigue siendo intensa y no pueden ser las clases medias las que sigan asumiendo la recesión. Hay que poner algo de justicia social para salir de esta crisis tan dura.

--¿Hay espacio para la política en esta época? En Grecia e Italia gobiernan dos personas que no eligieron los ciudadanos, y en el país transalpino ningún miembro del nuevo gabinete proviene de ella...

--Si hoy la política está denostada es por culpa de la derecha. De una manera sibilina, ha estado lanzando mensajes de que lo que debía prevalecer por encima de todo eran los mercados. Y se ha demostrado que cuando no ha habido una regulación de los mercados mediante la política, ha pasado lo que ha pasado. Me parece injusto que se denoste.

Como en todas las profesiones, puede haber alguien que la desprestigie, pero tengo muy buena valoración de los políticos de este país porque muchos son responsables. Los socialistas tenemos una gran vocación de servicio para ayudar a mejorar la sociedad.

--¿Si gobiernan ustedes es no habrá recortes sociales?

--Las políticas sociales no se tocan. Para que cualquiera pueda acceder a la educación sin importar su origen y condición, tenemos que buscar fórmulas para sustentar la sanidad o la educación. Y nosotros decimos cómo hacerlo. Una de las propuestas es mediante impuestos indirectos en el caso del alcohol de alta graduación y el vino o el ahorro del gasto farmacéutico. Lo que no haremos es la cuadratura del círculo que propone el PP: bajar los impuestos, reducir el déficit y mantener los servicios. Todo el mundo entiende que eso no puede ser y no explican cómo lo harán.

--Si hay una opción de que ustedes gobiernen y necesitan a IU, ¿cuál sería su posición?

--Son adversarios políticos. Lo que haría IU no lo sé. Sí que sé que en Extremadura ha preferido que gobierne el PP.

--¿Y ustedes, dialogarán?

--Cuando hemos estado ocho años en la oposición hemos sido pactistas y con voluntad de diálogo. Lo mismo cuando hemos gobernado. El Pacto Antiterrorista lo propuso Zapatero a Aznar cuando este tenía mayoría absoluta. Hay que tener altura de miras cuando se gobierna y cuando se está en la oposición, algo que el PP no ha hecho nunca, demostrando su irresponsabilidad.

--Biel cree que Rajoy es lo mejor que le ha pasado a Aragón desde el Conde de Aranda. ¿Qué le parece la opinión de quien fue vicepresidente de un gobierno presidido por un socialista durante 12 años?

--Durante los doce años de gobierno PSOE-PAR se consiguieron muy buenos resultados para la comunidad autónoma y desde mayo, el PAR ha decidido pactar la gobernabilidad con la señora Rudi. Qué quiere que le diga. Esa decisión del señor Biel, que es quien manda en ese partido, llevará al PAR a su desaparición. No me explico cómo esta formación ha entregado al PP todos sus diputados a cambio de poca cosa y cómo va a explicar a sus votantes que ha entregado tanto a un partido trasvasista como el PP. Son tantas las paradojas que me resulta muy raro todo, pero imagino que será más raro de entender para sus afiliados o votantes.

--¿Tanto temen a CHA-IU, que ha centrado parte de sus ataques esta última semana de campaña?

--Me presento a estas elecciones para mantener el resultado del 2008. Es verdad que algunas encuestas dicen que un diputado que obtuvimos corre peligro por esta coalición. Pero el lunes habrá un presidente del gobierno que se llamará Rajoy o Rubalcaba. Por tanto, el único voto útil de la izquierda es el voto del PSOE, porque es el único capaz de frenar los recortes que la derecha quiere aplicar si gobierna.

--Se ha hablado muy poco de promesas territoriales esta campaña. ¿Hay hueco para ellas?

--Es que sinceramente, la prioridad para los aragoneses y para todos es crear empleo. Plantear grandes infraestructuras o propuestas importantes a nivel económico sería una tomadura de pelo. Y sí que hemos visto propuestas para Aragón estos días encima de la mesa: el trasvase del Ebro del PP.

--¿Cuál será su papel como diputada?

--De total responsabilidad. Los socialistas siempre demostramos que trabajamos con dignidad.