Los mineros no están solos. Aplausos en la calle y apoyo de todos los partidos políticos. Salvo uno: el PP. Solidaridad y críticas al Gobierno central, que ha recortado las ayudas al carbón en un 65%. Los populares, en cambio, enmarcan el tijeretazo en la crisis y hablan de pensar en alternativas para el sector.

El portavoz de IU, Adolfo Barrena, calificó de "inverosímil" la actitud del Gobierno central por no querer negociar con los mineros. "Apoyamos las movilizaciones y pensamos que es el momento de sentarse a hablar", aseguró. "Lo que debe hacer el Ejecutivo de Mariano Rajoy es cumplir con sus compromisos. Así lo quiere la ciudadanía y lo está demostrando con el apoyo a los mineros".

Desde CHA, José Luis Soro rechazó el recorte por "insolidario". "Condena a muerte a las comarcas aragonesas que dependen de este sector", lamentó. "La marcha negra tiene todo nuestro respaldo". El líder socialista, Javier Lambán, aseguró que la "supervivencia" de algunas zonas de Teruel queda en entredicho tras el ajuste aplicado por el Ministerio de Industria.

El diputado del PAR, Joaquín Peribáñez, exigió al Gobierno de Rajoy un "esfuerzo" para mantener las inversiones en un sector que "muy importante para la provincia de Teruel". "Vamos a estar cerca de los mineros y sus familias", avanzó.

Solo el PP evitó respaldar a los mineros que ayer se manifestaron en Madrid. "El Gobierno ha tenido que adaptar a la crisis el paquete de ayudas a la minería", precisó el portavoz del PP, Antonio Torres. Para los conservadores, lo que hay que hacer a partir de ahora es pensar en alternativas al sector del carbón. "Es imprescindible seguir hablando del futuro de las comarcas".