Conforme avanza la investigación se van conociendo más detalles de lo que pudo ocurrir el pasado lunes en Pirotecnia Zaragozana. Aunque todavía no hay conclusiones, los expertos de desactivación en explosivos (Tedax) ya van perfilando una serie de cuestiones que darían respuesta a por qué fue tan devastador este accidente en el que murieron seis trabajadores y otros seis resultaron heridos. La explicación científica estaría en el calor, según el sargento de este grupo, José Luis Millán.

Este miembro del instituto armado, que está al frente de las pesquisas, considera que existe una probabilidad "muy elevada" de que la primera explosión aumentara considerablemente la temperatura en el interior de la campa que provocó que los componentes químicos que allí se guardaban detonaran o se prendieran fuego. De ahí que la onda expansiva arrasara las instalaciones de esta histórica fábrica de fuegos artificiales situada en Garrapinillos (Zaragoza).

MERCURIO

"Estamos muy extrañados de cómo se propagó la deflagración", admite Millán a EL PERIÓDICO, quien apunta que pudieron registrarse valores entre los 500 y los 2.000 grados centígrados. Un infierno que habría tenido una duración de tan solo dos segundos, aunque devastadores. De nada sirvieron los taludes de tierra que rodean las casetas donde los trabajadores hacen las mezclas y que funcionan como escudo.

Esta cuestión explicaría por qué ardieron productos terminados, ya que, según expertos consultados, un fuego artificial listo para comercializar necesita 250 grados como mínimo para que se inicie por combustión espontánea. De poco habrían servido, entonces, las pruebas a las que se someten antes de obtener el visto bueno para ser transportado.

Al efecto del calor se añadiría que en el momento de la detonación estaban estacionados junto a unos polvorines dos camiones que modificaron la trayectoria de dicha onda expansiva y que también la multiplicaron, según el instituto armado.

QUEMA

Mientras se lleva a cabo la investigación, el grupo francés Etienne Lacroix continúa trabajando en la limpieza de las instalaciones. Los Tedax hicieron ayer varias quemas controladas de explosivos que hoy continuarán. Y es que hay una serie de materiales que presentan un estado inestable y es peligroso que sea transportado a las instalaciones de la empresa matriz en el país galo.

Cuando todo el material salga de las instalaciones, la Guardia Civil permanecerá varias semanas en el lugar recogiendo todos los vestigios que son necesarios para la investigación. El Juzgado de Instrucción número 10 de Zaragoza ha asumido el caso.