La carretera autonómica A-130, entre Monzón y el pueblo de Ontiñena, en la provincia de Huesca, estuvo cortada ayer al tráfico en el kilómetro 1 debido a un desprendimiento de un talud que ocurrió por la tarde.

Fuentes del Centro de Gestión de Tráfico en Zaragoza indicaron que el desprendimiento se produjo en el término municipal de Monzón, a las afueras de la localidad, y que se desvió el tráfico por el polígono industrial próximo al lugar de la avalancha a fin de que el tráfico no se viera interrumpido.

De esa forma, se garantizó el paso de vehículos mientras duraron las labores para la retirada de la tierra y las piedras que habían invadido la calzada y que hacían imposible circular por la misma.

Sin embargo, este derrumbe no ha sido el único este año en la localidad. El mes pasado, se derrumbó un muro del castillo templario de Monzón debido a las intensas lluvias. El agua fue filtrándose por la muralla hasta que la debilitó y cedió su base.

Permaneció cerrado hasta finales de marzo y este mes han comenzado las obras de consolidación para evitar que se vuelva a producir la misma situación.