Un empate técnico a cuatro entre PP, PSOE, Podemos y Ciudadanos. Este es el resultado que se desprende de la encuesta electoral realizada por Podemos en Aragón y que revela que, aunque el PP ganaría las elecciones con una horquilla de voto de entre el 24 y el 28%, la nueva formación no le iría a la zaga con un porcentaje de voto estimado de entre el 23% y el 26%, es decir, que tendría muchas opciones para ganar las elecciones autonómicas. Le seguiría el PSOE (19-20%) y Ciudadanos (19-21%). Es decir, que la encuesta confirma las tendencias que marcan también otros sondeos, con cuatro fuerzas con una nutrida presencia en las Cortes de Aragón.

La secretaría de Análisis Político y Social de Podemos, Carolina Bescansa, presentó ayer estos resultados junto al candidato a las Cortes, Pablo Echenique, dado la elaboración de este sondeo se ha sufragado con las aportaciones ciudadanas. "Quien paga manda y en Podemos quien manda es la gente", aseguró Bescansa, tras recordar el compromiso de la formación de hacer públicos los resultados de la encuesta, que ha sido elaborado a partir de 1.800 entrevistas telefónicas en Aragón y que tiene un margen de error del 2,5.

Debido a este margen y al ser el resultado tan ajustado entre los partidos, podría hablarse de un empate técnico entre las cuatro formaciones, a las que habría que añadir el PAR (3-5%), CHA (2-4%), IU (1-3%) y UPD (1-2%), partidos que, según este sondeo, podrían quedar fuera del parlamento aragonés si, como auguran estos resultados, no superasen el 3% requerido para tener representación. Eso en estimación de voto, es decir, con los resultados ya cocinados incorporando variables como el recuerdo de voto o la valoración de los líderes para tratar de obtener un panorama más realistas. Si se tiene en cuenta la intención directa de voto, los resultados siguen siendo igual o más ajustados. En este caso, el PSOE ganaría las elecciones con el 19% de los sufragios; seguido del PP, con el 17%; y muy de cerca por Podemos, con el 16%. Ciudadanos se quedaría con el 14% de los votos.

Además de estos datos, Bescansa destacó también otros dos, a su juicio si cabe aún más relevantes: el 51,5% de los aragoneses aún no ha decidido qué votará en las próximas elecciones. "Se trata de una situación inédita desde la transición. Cada vez más, los suelos electorales de los partidos son más débiles y hay más personas que están dispuestas a cambiar durante las elecciones", apuntó la responsable de Análisis Político y Social de Podemos. Es decir, que esta campaña será "decisiva", dado que el escenario está "abierto". Una incógnita similar a la de posibles pactos tras los comicios. El candidato indicó que hablarán con "todas las fuerzas", pero "no de sillones, ni de consejerías".