--¿Qué ha sentido cuando ha conocido que iba a ser la pregonera de las Fiestas del Pilar?

--Me he sentido más aragonesa que nunca. Mientras estaba desayunando me ha llamado (por ayer) el alcalde, Juan Alberto Belloch, y me ha daod la grata noticia. Además, soy la primera gitana que hace el pregón del Pilar y eso es romper moldes.

--¿Ha estado en el pregón?

--Sí, claro. Estuve el año pasado viendo a Amaral, estuvieron fantásticos espero estar a la altura de las circunstancias. Además, un año fui la pregonera de las peñas de Zaragoza y para mí también fue un gran honor.

--¿Qué va a sentir al salir al balcón del Ayuntamiento?

--Se me va a venir a la cabeza a aquella gitana de 15 años que bailaba y luego pasaba el platillo, que no ha podido ir al colegio porque tenía que trabajar. Recordaré las calles de mi barrio y a toda mi gente. Espero poder acabar el pregón sin emocionarme.

--¿Ya ha empezado a pensar qué va a decir en el pregón?

--La verdad que la noticia me ha cogido desprevenida y no tenía nada pensado. Aunque, en los próximos días iré pensando el discurso que saldrá directamente de mi corazón.

--¿Qué recuerdos le traen las fiestas de su ciudad?

--Normalmente siempre he venido a trabajar y no he podido vivir las fiestas como una espectadora más. No he podido ir a la ofrenda de flores porque me acostaba muy tarde. Pero este año quiero estar en todos los actos y acudir a esa añorada ofrenda. Pienso vivir las Fiestas del Pilar porque cada vez más añoro a mi tierra. Quiero dejar este legado a mi nieta.