Las precipitaciones recibidas en las últimas 24 horas en las cabeceras vasca y navarra del Ebro hará que en las próximas horas se note el notable incremento del caudal del Ebro a su paso por Aragón. De hecho, hoy se espera que en Castejón se sitúe entre los 1.800 y los 2.000 metros cúbicos por segundo, por lo que este repunte podría llegar a Zaragoza 48 horas después, el viernes, con un caudal aproximado de unos 1.600 o 1.800 metros cúbicos por segundo, casi el doble de los registros de ayer, de casi mil metros cúbicos.

Este aumento generalizado de caudales desde la cabecera hasta las cuencas navarras se suma al aumento moderado registrado en algunas de ellas el pasado fin de semana. La lluvia se centró principalmente en las cuencas del Zadorra y Bayas (hasta 70 litros por metro cuadrado) y las del Ega (60) y Arga (80). En esta última, se esperan hoy valores por encima del límite entre avenida ordinaria y extraordinaria. Mientras, en la cuenca del Aragón, se redujo el desembalse en Yesa hasta verter solo el caudal ecológico (4 metros cúbicos por segundo) para atenuar la crecida en la confluencia de caudales.

Con estos datos, la preocupación vuelve a estar presente en los municipios aragoneses por el nivel que alcance el río en las próximas horas. En la capital aragonesa, ayer ya se registraron algunos daños, ya que el río fue capaz de arrancar y arrastrar el embarcadero del recinto de la Expo. Es la segunda vez en menos de un año que esto sucede, aunque en esa ocasión --marzo del 2008-- iba con más caudal (1.200). El pantalán recorrió casi un kilómetro, pasando bajo el puente de La Almozara, hasta detenerse junto a Helios, donde los Bomberos lo sujetaron atándolo a un muro del centro deportivo.

Desde Expoagua aseguraron que solo quedaba en el río uno de los dos pantalanes (el otro está almacenado) y se dejó fluctuando con el nivel del río "para estudiar su comportamiento frente a las crecidas y las inclemencias climatológicas". Tras lo sucedido, apuntaron que "en cuanto el río lo permita será retirado" y que, en contra de los modelos instalados en el Náutico y en Vadorrey, este "requeriría un rediseño para garantizar su funcionalidad todo el año".