Medio millar de zaragozanos y sorianos participaron ayer en una marcha senderista de protesta contra el proyecto de la mina de magnesita de Borobia en la que recorrieron el barranco de Ciria, una de las zonas de mayor riqueza ambiental del río Manubles. El cauce es uno de los cuatro cuya existencia se ve amenazada por la iniciativa industrial.

Los participantes en la marcha salieron por la mañana de la plaza Mayor de Ciria para dirigirse hacia el barranco, la zona en la que el Manubles discurre bajo tierra. Allí, en un recorrido de alrededor de catorce kilómetros, observaron la vegetación de la zona, los cañones por los que discurre el río y las numerosas buitreras del área. Posteriormente, llegaron a la sierra del Tablado, donde Magnesitas y Dolomías proyecta emplazar la mina.

El programa de la jornada terminó con el regreso a Ciria, donde celebraron una comida de hermanadas al final de la cual los responsables de la Plataforma en Defensa del Agua y la Tierra agradecieron el apoyo mostrado por los senderistas. La Sociedad Deportiva Comuneros, de Calatayud, se llevó el trofeo a la mayor participación: cerca de 200 miembros. El resto, en grupos menos numerosos, provenía principalmente de las provincias de Zaragoza --especialmente de Tarazona y su comarca-- y de Soria, las dos provincias en las que se concentran los 35 municipios más afectados por el proyecto. El club Guadalupe, de San Juan de Mozarrifar, aportó el grupo organizado más lejano. Aunque asistieron varias entidades --Casablanca, Olivar, Pirineos, Peña Guara, Naturateca, Carravilla, COAG de Soria, Torrelapaja y Ayud y 14 de Abril de Calatayud--, buena parte de los participantes llegó por libre. Entre ellos, un miembro de la Plataforma de Defensa del Ebro con el anagrama del tubo anudado, cuya presencia sorprendió a los organizadores de la marcha.

Los vecinos de la zona y los ayuntamientos --que están coordinando la oposición jurídica al proyecto-- temen que la puesta en marcha de la explotación minera puede tener graves consecuencias para los acuíferos de los que se abastecen las cabeceras de los río Manubles, Aranda, Isuela y Ribota.

El proyecto de la mina está promovido por la empresa Magnesitas y Dolomías S.A., de Bilbao, que prevé una inversión de 32 millones de euros y la creación de unos 200 empleos. Todavía no tiene el permiso de explotación.

Choni Pardo, concejala independiente de Borobia, explicó que el objetivo de la marcha era "ver lo que podemos perder". "Este proyecto no puede seguir adelante. Estamos convencidos de que se puede frenar", añadió.