La Policía arrestó ayer por la mañana a ocho jóvenes por una pelea ocurrida en un inmueble de la calle Compromiso de Caspe de Las Fuentes, que utilizaba como centro social para familias españolas en situación de precariedad el Movimiento Social Republicano (MSR), de corte neonazi.

Según fuentes policiales, la pelea se desató entre componentes de este movimiento y otros de la Falange, que al parecer también se encontraban en el edificio. Según explicaban los vecinos, durante la mañana colgaron junto a la bandera de España constitucional --que permaneció colgada en un balcón-- una con el emblema de la Falange, que luego fue retirada. Pero la Policía no pudo confirmar si esta exhibición tuvo algo que ver con el inicio de la trifulca.

AVISO El aviso del incidente lo dio, cerca del mediodía, una vecina del inmueble que residía legalmente en él. Alertaba de que los jóvenes de otros pisos se estaban peleando. La información era algo confusa, y dada la notoria presencia de grupos de extrema derecha en el inmueble la Policía organizó un amplio dispositivo de seguridad, con una decena de patrullas, y acordonó ambos lados de la acera en las inmediaciones del inmueble. Finalmente, sin embargo, no fue necesario tanto despliegue.

Los agentes arrestaron a los ocho presuntos participantes en la pelea, que comenzaron a salir, algunos de ellos esposados, en torno a las 12.30 horas, y conducidos en coches patrulla a dependencias policiales. Ninguno de ellos, según fuentes del Cuerpo, presentaba lesiones de consideración.

Los vecinos, algunos de ellos al tanto de la presencia del centro en la vía --se anunciaba con un gran cartel y una dirección de internet--, no se explicaban qué había pasado. Varios de ellos coincidieron en el incidente de la bandera falangista, pero también en que los ocupantes "no armaban follón". Anteayer, la asociación de vecinos de Las Fuentes había acordado estudiar si podían tomar medidas contra la presencia del MSR en el barrio.

A algunos de los detenidos se les permitió recoger las pertenencias que tenían en el inmueble, por lo que podía dar la impresión de que se trataba de un desalojo. Pero la Policía aclaró que no, ya que el dueño del inmueble, "una persona jurídica", no había interpuesto ninguna denuncia por la ocupación de los pisos. No se trata de un bloque okupado, ya que algunos de los vecinos, como el que dio el aviso, residen legalmente allí. Los ocho detenidos pasarán, previsiblemente hoy, a disposición judicial.