La fórmula para la construcción del futuro hospital de Alcañiz (Teruel) será de colaboración público-privada, con financiación de la edificación a cargo de la empresa adjudicataria, y tendrá en total 193 camas, aunque debido a las dimensiones de las habitaciones, será posible poner una cama más en caso de necesidad. Aunque el hospital se construirá con participación privada, la gestión de la prestación sanitaria va a ser, según el consejero de Sanidad, Ricardo Oliván, "100% pública" y la externalización de los servicios se concretará en los que no son asistenciales.

Así lo explicó ayer Oliván en la sesión plenaria de las Cortes de Aragón, en respuesta a una pregunta formulada por el diputado socialista Eduardo Alonso, quien se interesó por qué fórmula legal concreta utilizará el Gobierno autonómico para construir el hospital de Alcañiz y cuántas camas tendrá en el equipamiento.

Alonso recordó que tras dos años de gestión, el actual ejecutivo aragonés "todavía no ha comenzado los trabajos", y que persisten las dudas sobre la titularidad del equipamiento, el edificio y los terrenos.

El responsable del departamento de Sanidad zanjó así la incertidumbre derivada de las versiones que habían ofrecido él mismo y algún miembro destacado de su gabinete. Por ejemplo, la gerente del Servicio Aragonés de Salud, María Ángeles Alcutén, quien en una visita reciente a la localidad turolense aseguró que todavía se estaba estudiando la fórmula.

OBRA PÚBLICA Alcutén ya apuntó, eso sí, que se echaría mano de un contrato de "concesión de obra pública", en el caso de que no pudiera emplearse dinero público, como parece que ocurrirá. Este tipo de contratos se caracteriza por una contraprestación que recibe el contratista, que puede consistir en el derecho a explotar la obra.

El consejero defendió este modelo porque no es posible acometerlo con los escasos recursos públicos disponibles y restó importancia al hecho de quién sea el propietario del edificio, mientras los alcañizanos estén bien atendidos. También recordó que fue el socialista Marcelino Iglesias quien prometió en el 2007 la construcción del hospital y que éste se inauguraría en el 2011, cosa que no sucedió.

La portavoz de CHA, Nieves Ibeas, también preguntó al consejero por el hospital bajoaragonés, en su caso por la falta de transparencia de la información proporcionada sobre esta infraestructura, que Oliván negó rotundamente. "Si no se conoce la información que solicitan es imposible darla",dijo el consejero, que por otra parte aseguró que él o miembros de su equipo ya han respondido a 40 iniciativas parlamentarias al respecto.

La semana pasada, el futuro centro sanitario en el Bajo Aragón se erigió también protagonista en la Diputación de Teruel. Los partidos en la oposición exigieron que la construcción y la gestión sean públicas.