"Fin del bipartidismo", "regeneración democrática" y "pactos claros y puestos por escrito". La diputada y portavoz de UPD, Rosa Díez pasó ayer por Zaragoza subida en una ola de optimismo generado por las buenas expectativas de los sondeos preelectorales para las próximas elecciones europeas. También en Aragón, tierra de pactos.

"El bipartidismo ha dado de sí todo lo que tenía que dar y es responsable de la situación actual. Los ciudadanos necesitan otra opción política, un partido que defienda el Estado en clave de solidaridad, de igualdad, de justicia social y de regeneración democrática". Así se presenta UPD, una formación joven sin tacha, pues todavía apenas ha tocado el poder, con un discurso de líneas generales que habla de regeneración y de fin del despilfarro, con una líder veterana que, sin embargo, está sabiendo explotar el descontento de los votantes. "Los ciudadanos quieren regenerar la democracia. Nos van a votar para que seamos exigentes y podremos equivocarnos. Ahora, lo que no haremos nunca es engañar a nadie. La gente va a saber siempre a qué atenerse", defendió ayer.

Díez caricaturizó a los dos grandes partidos: "Hay un pacto de hierro entre PP y PSOE para salvar sus muebles, no para hacer una política de Estado. El salvar al soldado Alfredo o al soldado Mariano se ha convertido en la clave. Para las cuestiones importantes son un partido único: duplicidades y despilfarro, el cerrar instituciones superfluas, la justicia, el órgano de gobierno de los jueces, el control de las cajas de ahorros, la ley electoral..." Todas esas cuestiones "vertebradoras" son las que UPD exigirá sobre la mesa en pactos que pondrá "por escrito". Luego quedará bajar a la arena, asuntos como el trasvase, que el coordinador en Aragón, Carlos Aparicio, rechazó de forma rotunda, y la financiación autonómica, que para Díez debe resolverse atendiendo al criterio de "garantizar el acceso a las prestaciones y derechos básicos a todos los ciudadanos vivan donde vivan".