El hecho de que la policía haya comprobado que una misma persona estuvo presente en los escenarios de dos asesinatos: el de Rocío Wanninkhof (en octubre de 1999) y el de Sonia Carabantes (el pasado mes de agosto) no significa que Dolores Vázquez --única acusada por el caso Wanninkhof -- sea inocente. Lo único que demuestra es que, posiblemente, alguna otra persona participara en el crimen. Esta es la tesis del abogado de la familia Wanninkhof, Marcos García Montes, que ayer insistió en la culpabilidad de Vázquez.

El letrado rechazó la posibilidad de que el juicio contra Vázquez, previsto para el 14 de octubre, quede sobreseído. Es decir, archivado. El abogado de la única acusada, Pedro Apalategui, así lo pretende. A su juicio, el examen de ADN es una prueba que exculpa a su clienta.

UNA MISMA PERSONA Los controles han confirmado que una misma persona --no se sabe quién, aunque sí que es un varón-- estuvo en los lugares donde ambas jóvenes fueron asesinadas: Mijas y Coín. Según el abogado de Vázquez, la prueba de ADN confirma que el asesino de Rocío es esa persona y no Vázquez.

De momento, ambos letrados han solicitado a la autoridad judicial el informe completo genético. Este comprobó que el ADN de los restos de tejido encontrados en la mano de Sonia Carabantes coincide con el de la saliva hallada en una colilla que estaba en las inmediaciones del lugar donde fue descubierto el cuerpo de Rocío Wanninkhof, en Marbella (Málaga). El fiscal del caso, por su parte, continúa estudiando el sumario y, de momento, no ha rechazado la culpabilidad de Vázquez.

"¿POR QUE TIENE MIEDO?" La familia Wanninkhof sigue pensado que Vázquez asesinó a puñaladas a Rocío. "Si es inocente, como dice ella, ¿por qué tiene miedo a ir a juicio? Si ella no mató a Rocío debería tener ganas de que se celebre la vista para que demuestre que ella no lo hizo", destacó el letrado de la familia.

La madre de Rocío, Alicia Hornos, también compareció ante los periodistas junto a su abogado para pedir "justicia". Hornos recordó que el primer juicio contra Dolores Vázquez --en el que fue condenada a 15 años de cárcel aunque el Tribunal Supremo anuló la sentencia e instó a celebrar una nueva vista-- demostró la existencia de "34 indicios" contra Vázquez. Su letrado recordó que dos indicios son prueba indirecta.

La madre de Rocío mencionó la larga relación sentimental que mantuvo con Dolores Vázquez. Esta, según su versión, maltrató físicamente a la joven en numerosas ocasiones. "Un día la cogió por el cuello y la abofeteó. Mi hija subió a mi cuarto y me dijo que Loli la mataría cualquier día", comentó.

Alicia Hornos también recordó que una vez rota la relación entre ella y Dolores Vázquez, ésta acudió a la casa de su examante y le pidió volver. Al toparse con un "no" como respuesta, Vázquez le dijo: "Te voy a dar donde más te duele. Vas a llorar lágrimas de sangre".