El pulso sindical por la negociación del convenio colectivo y la revisión salarial llevó ayer a una delegación de la Junta de Personal a pasar la noche encerrada en la Casa Consistorial. La totalidad de los sindicatos considera que el equipo de Gobierno municipal del PSOE-CHA ha incumplido su palabra y se niega a aplicar una subida salarial del 0,6% pendiente del año 2003. Por ello, convocarán hoy una asamblea previa al pleno, ante el que mostrarán su desacuerdo.

Por su parte, el alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch, cree que el encierro se debe a "un problema de interpretación", y subrayó que las elecciones no son el momento para plantear "ningún conflicto". Y añadió: "No es el momento más adecuado para llevar a cabo unas conversaciones sindicales".