La creación de la unidad especial de intervención de la Policía Local de Zaragoza se retrasará hasta Navidades, dado que las negociaciones con los sindicatos aún se deben cerrar la próxima semana y sus integrantes se tendrán que someter a un periodo de formación que se puede alargar dos meses. Así lo aseguraron fuentes oficiales del equipo de gobierno municipal PSOE-CHA, quienes mostraron su satisfacción por el interés que ha despertado ya la Unidad de Apoyo Operativo (Uapo) entre más de 300 agentes de la plantilla.

El objetivo político inicial era disponer con algo más de un tercio de la plantilla, 57 de los 150 efectivos previstos, para las próximas fiestas del Pilar, pero los contactos iniciados este verano se han demorado. Ahora, se pretende sacar adelante el decreto de creación de la Uapo y la modificación de la relación de puestos de trabajo en el plazo de un mes.

Las citadas fuentes señalaron que la selección de los uapos, como ya se les conoce en el Cuerpo, comenzará a mediados de octubre y los elegidos se someterán a un periodo de formación que se puede alargar hasta dos meses, por lo que es imposible que la nueva unidad policial esté operativa antes de las fiestas navideñas. "Se ha generado una gran expectación, sobre todo entre los policías más jóvenes", señalaron.

INSTRUCTORES DE PRESTIGIO Los agentes recibirán instrucción específica, en la que se incluirán clases de "defensa personal policial", una mezcla de varias artes marciales --como yuyitsu, kárate y aikido-- que está pensada específicamente para Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Con este fin, la Policía Local tiene la intención de fichar a instructores de prestigio nacional.

El equipo de gobierno PSOE-CHA pretende hacer una exhaustiva selección entre los aspirantes, que deberán superar una dura prueba físicas, un test psicológico y una entrevista personal. Se baraja incluso la contratación de una empresa especializada para las pruebas, dado que se evaluará la capacidad de trabajar en equipos y de resolver conflictos, la resistencia al estrés y la aptitud de resistencia.

La Unidad de Apoyo Operativo estará constituía por equipos de ocho policías bajo el mando de un oficial. Para Navidades estarán en servicio un intendente --que hará las funciones de jefe de la unidad--, un inspector --que ejercerá de jefe operativo-- y un subinspector que estará al frente del primer grupo, constituido por seis oficiales y 48 policías.

Estos agentes tendrán entre sus cometidos el control de las zonas de bares y del fenómeno del botellón, la intervención en altercados, el control de la venta de drogas, además del apoyo a sus compañeros del Cuerpo en acontecimientos especiales. En este apartado se incluirán las visitas de autoridades, grandes acontecimientos deportivos, manifestaciones, protestas y cualquier otro acto que implique grandes concentraciones de público.