La presidenta de la Asociación Torre Ramona, Olvido Blasco, al tiempo que defendió la libertad de horarios para todos los comercios de la ciudad también apuntó que, en las alegaciones que ya ha remitido al Ayuntamiento de Zaragoza, aseguró que "hemos manifestado que la declaración de zona de gran afluencia turística no la vemos del todo clara porque entendemos que Puerto Venecia solo habla de sus planes de futuro mientras que ahora mismo solo existe como zona comercial", tanto en la primera fase que ya está abierta al público como en las obras, ya que "solo está haciéndose la parte comercial no la de ocio". Dudas sobre un proyecto de futuro más ambicioso, de ocio e interés turístico, pero que solo ven en recreación virtual y a través del extudio de una consultora en el que se manejan unas previsiones que "impresionan pero en los que cuesta creer". Es precisamente la imposibilidad de ofrecer datos y no previsiones lo que le ha supuesto muchas críticas a Puerto Venecia y a su solicitud, pero las asociaciones de consumidores coinciden en que Zaragoza no tiene una oferta tan completa como esta. El debate ahora es claro: los detractores defienden que es una excusa para abrir todo el año, y quienes lo apoyan se preguntan que por qué no.