Junto a la llegada del calor estival, esta semana aparecen las primeras rebajas en el comercio de proximidad. Descuentos tímidos, en algunos casos, que se irán aumentando de cara al final de este mes cuando comience el periodo habitual de rebajas en las grandes superficies y cadenas comerciales.

A causa del círculo de vida de la moda, tradicionalmente estas se han celebrado en unos periodos regulados y determinados durante el invierno y el verano. Sin embargo, desde hace tres años esta cuestión está liberalizada y es decisión del propio comerciante.

"Para este año se prevé un incremento del 5% en el consumo respecto al año pasado, con una media de gasto por comprador que aumente de los 80 a los 84 euros para esta temporada de rebajas", explica José Antonio Pueyo, presidente de la Federación de Empresarios de Comercio y Servicios de Zaragoza y Provincia (Ecos). Aunque, la opinión general de los propietarios de pequeños negocios es algo diferente. Muchos de ellos coinciden en que el volumen de ventas es muy similar al del año anterior y aseguran que la recuperación económica, de momento, no se ha hecho presente en sus establecimientos.

ESTRATEGIA Por esta razón, apuntan al adelanto del periodo de saldos como estrategia comercial frente a sus principales competidores: las grandes superficies. La proliferación de este tipo de establecimientos ha repercutido negativamente en el negocio local. "En el pequeño comercio jugamos con la ventaja de ofrecer un trato más cercano al cliente y este tipo de acciones es muestra de ello", comenta Elena Salazar, propietaria de una zapatería con el mismo nombre, que desde hace dos días ha lanzado descuentos del 10 al 50%. Para el periodo estival de rebajas el porcentaje de facturación es más bajo porque se trata de artículos cuyo precio también es menor. Esto puede suponer hasta un 20% menos en los ingresos de los establecimientos.

Con la irrupción de la crisis se han observado algunos cambios en el comportamiento del consumidor. En cuanto al mercado de la moda, "estamos ante un cliente que busca comprar siempre en periodo de oportunidad. Esto provoca que vaya al comercio en la fase anterior para preseleccionar el producto y, finalmente, comprarlo cuando esté de oferta", comenta Pueyo, quien asegura que "la paga extra que cobran muchos trabajadores durante estas épocas sumado a un tiempo que acompaña darán como resultado unas rebajas con ventas altas".

En esta línea, Vanessa Til, responsable de Alejandro Moda, recuerda que "tras campañas que han sido más flojas, las rebajas suelen ser bastante agitadas".

Además, actualmente contamos con más gente ocupada en Aragón, y se dispone de mayor renta a causa de una deflación de precios negativos del -1%, que libera salario en pos de las compras. Con estos datos existe un clima muy esperanzador para las próximas rebajas.