El concejal de Vivienda del Ayuntamiento de Zaragoza, Pablo Híjar, avanzó ayer uno de sus objetivos más destacados de cara a los próximos presupuestos al adelantar su intención de poner en marcha un plan de reforma a seis años en el parque municipal de pisos públicos con el que dedicar «unos 40 millones de euros» a obras de mejora que sirvan para frenar el evidente deterioro que sufren algunos de ellos y aplicar mejoras que faciliten su mantenimiento en el futuro.

El Gobierno de Zaragoza en Común (ZeC) todavía no se ha puesto a negociar las cuentas del año próximo, pero la idea de Híjar pasaría por iniciar las primeras obras «en el 2018» y no circunscribirlas únicamente a la actual legislatura sino aprobar el plan que abarque también la siguiente. Así «centenares de pisos municipales» se podrían ver beneficiados por una reforma necesaria y, en algunos casos, urgente.

El edil de ZeC explicó que algunos de estos inmuebles sufren «importantes deterioros», especialmente referidos a «cerramientos y carpintería» que se deben, fundamentalmente, a que llevan muchos años construidos y son «de otras épocas», en las que no se aplicaban, por ejemplo, medidas de eficiencia energética que hoy están muy extendidas. Esta «inversión millonaria» comenzaría, añadió, por aquellas viviendas «que peor situación tienen», aseveró, «como las de la calle Pedro Saputo».

«No es una pequeña intervención sino un plan ambicioso e importante», expuso Híjar. Seguramente, la actuación más global de las que se han realizado por parte del consistorio en los últimos años en el parque municipal de viviendas, que cuenta con más de 2.000 inmuebles de titularidad pública. Y llega después de que algunos grupos de la oposición, en especial el PP, hayan denunciado el mal estado de conservación de varios de esos pisos.

Sin embargo, a este objetivo de ZeC le faltan muchas cuestiones por concretar y que abordar con sus principales apoyos en los últimos dos presupuestos, el PSOE y CHA, que hasta otoño no se sentarán a hablar de las cuentas del año próximo.