El móvil sexual podría estar detrás del crimen de la mujer de mediana edad hallada muerta el pasado sábado en un parque eólico a unos cinco kilómetros de la localidad de Sos del Rey Católico. La víctima podría llevar un tiempo muerta, quizá unos días, a tenor del estado del cadáver, que presentaba la cara muy inflamada y desfigurada, hasta el punto de hacer imposible una identificación visual.

Se trabaja bajo la premisa de que la muerte se produjo en otro lugar y que la víctima fue abandonada, sin ninguna clase de cuidado o precaución, junto a un aerogenerador en el puerto de Sos.

Fuentes próximas a la investigación señalaron que, si bien todas las hipótesis siguen abiertas, los indicios apuntan a que la mujer pudo ser víctima de una violación.

Este extremo, fundamental para las pesquisas que desarrolla la Policía Judicial de la Guardia Civil de Zaragoza, será dilucidado en la autopsia que se practicará en el Instituto de Medicina Legal de la capital aragonesa, donde se halla depositado el cuerpo desde el sábado.

AUTOPSIA / El juez de Ejea que instruye el caso decretó el secreto del sumario, por lo que no han trascendido detalles sobre la identidad de la víctima ni tampoco sobre el resultado de la autopsia. En cualquier caso, los investigadores están examinando a fondo el registro de desaparecidos en busca de personas que encajen en el perfil de la muerta: una mujer entre 38 y 50 años.

«Lo único seguro es que no se trata de alguien que viviera en Sos», manifestó ayer un vecino de la población cinvovillesa, que estos días es un hervidero de comentarios y conjeturas. «Aquí no se ha denunciado ninguna desaparición ni se habla de que haya podido ser alguien que pasa aquí sus vacaciones», añadió la misma fuente, que lamentó que el nombre de su pueblo se vea mezclado en un asunto turbio y muy desagradable. «Estamos consternados», subrayó.

Un rumor insistente entre los habitantes de la villa es que la víctima procedía «de muy lejos». «Se dice que si la mataron a gran distancia de aquí y el autor o autores del crimen la trajeron aquí para embrollar las pistas y dificultar la investigación», señaló un residente.

«Parece que fue violentada», manifestó otro vecino, que al igual que el anterior pidió que se preservara su anonimato.

UN LUGAR APARTADO / El o los autores del crimen trataron de ocultar el cadáver dejándolo «en un lugar apartado» al que se llega desde el puerto de Sos, tras recorrer cierta distancia por la carretera de Sofuentes y desviarse nuevamente para tomar una de las pistas que llevan al parque eólico.

«Si no hubieran pasado por ahí dos empleados de mantenimiento de los aerogeneradores, quién sabe el tiempo que habría estado allí el cadáver, pues es un sitio al que es complicado llegar», añadió la misma persona. Sos, donde en breve empezarán las fiestas patronales, está conmocionada por el dramático suceso. La localidad está estos días muy animada, llena de familias que residen en otras partes de Aragón y de la vecina Navarra y pasan allí temporadas durante el verano. Y en muchas conversaciones, inevitablemente, se habla del crimen y se hacen conjeturas sobre la identidad de la víctima.