Parece ser que los tiempos en los que uno se iba «de rebajas» y volvía a casa con un montón de bolsas de artículos que ni conocía han pasado a la historia. Hoy los consumidores tienen más claro lo que quieren y lo que necesitan, y aprovechan los descuentos para obtenerlo más barato. Será que la crisis convirtió al consumidor en un ser racional, pero esta tendencia es principalmente el consejo que mantienen desde las asociaciones de consumidores.
«No hay compra más cara que la que no se usa. Comprar por comprar solo porque las cosas estén más baratas no es una buena idea si lo que quieres es ahorrar dinero», asegura José Ángel Oliván, secretario general de la Unión de Consumidores de Aragón (UCA).
Dicho y hecho. En el día de ayer, primera jornada de las tradicionales rebajas posnavideñas, muchos de los compradores que llenaron las tiendas buscaban objetos que necesitaban desde hace tiempo. «Mi hijo necesitaba un abrigo y aprovechamos las rebajas para comprar este tipo de artículos que normalmente son más caros. Venimos a tiro hecho», comentaba una clienta en El Corte Inglés que fijó su presupuesto para esta campaña en 100 euros.
LA WEB COMO ESCAPARATE
Ese mismo pragmatismo aplicaron dos clientes en la tienda que Alejandro Moda tiene en la calle Lagasca. «Me caso dentro de poco y vengo a ver si puedo comprarme un traje más barato», decía un joven junto a su futura mujer. A pocos metros de ellos, otro señor de mayor edad se probaba otro. «El mío es para la boda de mi hija. No suelo comprar nada en rebajas aunque para este tipo de cosas vienen muy bien», afirmaba.
De vuelta en El Corte Inglés, otra pareja discutía sobre que abrigo comprarse. María Marco y David Balmont son estudiantes, por lo que su presupuesto no es muy grande. «Dependemos de lo que nos den nuestros padres y de lo poco que ahorramos trabajando», decían. Eso sí, ella gastará más que él. «Yo vengo a por algo que necesito pero luego siempre acabo picando algo», aseguraba.
«Los clientes hoy compran en la tienda física o por internet indistintamente. Muchos miran los productos por internet y luego vienen a la tienda a probárselo y se lo llevan», explica Isabel Paricio, de El Corte Inglés. Quizá por eso los compradores que ayer llenaban las tiendas no se dejaron llevar por la curiosidad que tiene ojear decenas de percheros cargados de descuentos. Sea por internet o por la crisis, las rebajas ya no son lo que eran.
