Como una balsa de aceite. El 17 congreso regional del PSOE se celebró este fin de semana en Zaragoza sin sobresaltos, con el liderazgo indiscutible de Javier Lambán y una nueva ejecutiva que termina de coser los rotos que dejó el movido cónclave de 2017. El político ejeano fue proclamado secretario general del PSOE en Aragón en un clima de unanimidad y tranquilidad que casi extrañaban después de una época convulsa en el partido que ya se da por cerrada.
Tal y como se preveía, refrendó su posición con un amplísimo apoyo de los delegados (del 97%), el mismo respaldo que cosecharon los nuevos equipos de la ejecutiva regional, el comité de garantías, el comité regional y el de ética. La presidenta del Congreso y representante del PSC, Meritxell Batet, acompañó ayer a Lambán junto a la ministra de Educación y FP, Pilar Alegría, y la consejera de Presidencia y responsable de Reto Demográfico del PSOE, Mayte Pérez. También estuvieron en primera fila los expresidentes Santiago Marraco, Ramón Tejedor y Marcelino Iglesias.
Javier Lambán dibujó en su discurso de clausura el PSOE que quiere. «Más socialdemócrata, más aragonesista y la casa común de todos los socialistas, tengan o no carnet», concretó. El también presidente autonómico defendió en una alocución de más de 40 minutos que él «sueña» con «Aragón como un proyecto común» en el que «no sobra nadie de los que está en esta sala». Empresarios, sindicatos, entidades del tercer sector y «todas las fuerzas políticas», aseguró Lambán, son necesarios para defender los intereses de la comunidad autónoma.
Aragón, proyecto común
Hará falta la «unión de todos los aragoneses», remarcó, para que Aragón sea escuchada a escala nacional. «En la defensa del interés común de nuestra comunidad autónoma, juntos, lograremos el éxito. Separados tendremos mucha menos fuerza», asumió, reivindicando el papel de todos los partidos políticos, sea cual sea su ideología. «Somos pocos, pero no poco», recordó, frente a comunidades autónomas «con siete millones de habitantes que son mucho más interesantes a nivel electoral para los partidos que nos miran desde Madrid».
Por eso, el líder socialista reivindicó un «proyecto común» de Aragón que se sienta «orgulloso de su historia» y defienda su Estatuto de Autonomía. «¿Creéis que tendríamos escuelas abiertas con tres niños si dependiera de Madrid? ¿Creéis que se estarían construyendo dos hospitales en Teruel si no fuera por el autogobierno?», se preguntó, entre los aplausos de los militantes. Después reclamó, sin embargo, que cuando los socialistas tengan que elegir «entre el partido, España o Aragón, o los dirigentes del partido, tengan absolutamente claro que lo primero es España, lo segundo Aragón, o a la par España y Aragón, y solo en segundo lugar, el partido, y en último, sus dirigentes».
Javier Lambán ensalzó los 140 años de historia del partido y su apuesta por la «transversalidad» y la «moderación» desde la cita de Suresnes que hizo al proyecto socislista «imprescindible» para el país. A partir de ahora, defendió, el proyecto debe ahondar en la socialdemocracia con la «libertad y la igualdad» por bandera.
Las aragonesas del federal
Las dos aragonesas en la federal acompañaron a Lambán en el primer día de su nuevo mandato. La responsable de Reto Demográfico y consejera de Presidencia, Mayte Pérez, ensalzó la figura de un «buen socialista y un socialista bueno». Un político «honesto y generoso» que tras seis años en el Gobierno aragonés ha sido capaz de cambiar «radicalmente» la realidad «de las políticas de recortes». Un socialista que «no ha escatimado ni un minuto de su tiempo en mejorar la vida de los aragoneses».
Menos efusiva fue la ministra Alegría, distanciada de Lambán en los últimos tiempos, y a quienes muchos señalaron que podría disputarle su liderazgo. No fue así. «Soy ministra gracias al apoyo del presidente Sánchez, pero yo no sería nada sin el apoyo y el cariño del PSOE aragonés en todos estos años», proclamó, en un guiño a un presidente «con un amor desbordado por Aragón».
Las dos han sido señaladas como posibles sucesoras. Pero queda tiempo para eso. Lambán se despidió parafraseando a uno de sus autores de cabecera, Antonio Machado. «Cuando llegue el día del último viaje, y esté al partir la nave que nunca ha de tornar, lo encontraréis a bordo ligero de equipaje, casi desnudo, como los hijos de la mar».
La nueva Ejecutiva regional del PSOE aragonés
Darío Villagrasa, Begoña Nasarre e Izgancio Urquizu conforman el tridente (que representa además a las tres provincias aragonesas) que acumula mayor peso orgánico en el partido tras el secretario general. Además, contará como es habitual con los representantes aragoneses en la federal, es decir, Pilar Alegría y Mayte Pérez; el portavoz del grupo parlamentario en las Cortes, Vicente Guillén; y como novedad, con la portavoz del grupo municipal en el Ayuntamiento de Zaragoza, Lola Ranera.
Como vocales, estarán en la nueva ejecutiva Pablo Castillo, Paz Arceiz, Mercedes Pérez, Juan Escalzo, Ana Villar, Santos Navarro, Marta Aparicio, María Jesús San Juan, José María Romances, Pilimar Zamora, Begoña López, Raúl Oliván, Luis Zubieta, Vanesa Pellicena.
En cuanto a las secretarías, este es el listado: grupos municipales, Sergio Ortiz; servicios sociales y dependencia, Maribel de Pablo; desarrollo estatutario, Horacio Rollo; Igualdad, Pilar Mustieles; Energía y transición justa, Alfonso Gómez; Economía y Empleo, Leticia Soria; Desarrollo, Joaquín Monesma; Patrimonio y Cultura Aragonesa, Michel Villalta; Política Municipal, Manuela Berges; Universidad, Florencio García Madrigal; Lucha contra la despoblación, Maricarmen Soler; Turismo, Olvido Moratinos; Relaciones políticas, Carlos Pérez Anadón; Política Cultural, Marisancho Menjón; Política Comarcal, José Ángel Calvo; Movilidad Sostenible y Agenda Urbana, Carmen Dueso; Educación y FP, Alfredo Sancho; Agricultura, José Manuel Roche; Participación Ciudadana, Noemí Villagrasa; Acción Electoral, Ideas y Programas, Ignacio Urquizu; Política Autonómica, Begoña Nasarre y Secretaría de Organización, Darío Villagrasa.
