El aeropuerto de Zaragoza se queda sin una ruta más para el próximo verano. Se trata de la que iba a conectar a partir del mes de junio la capital aragonesa con la ciudad alemana de Múnich. Por decisión de la empresa, que achaca a la baja demanda, ha decidido cancelar la venta de billetes y abandonar toda opción de volar este año a este destino, ya que, según ha podido saber este diario, la ocupación era inferior al 60% de las plazas disponibles.

Triste final para uno de los dos destinos por los que Volotea pujó en el concurso público abierto por el Gobierno de Aragón en 2016, una subasta por operar conexiones con Venecia y Múnich a las que, más adelante, se sumó el destino nacional de Menorca. Tanto la ciudad italiana como la isla balear seguirán estando en la programación de vuelos de Zaragoza este verano, aún sigue la venta de billetes desde 19 euros a ambos destinos, aseguran las fuentes consultadas por este diario. En el caso de Venecia, por razones obvias, ya que su ocupación supera con holgura ya el 80% de los asientos y se acerca al 90% cuando todavía faltan abril y mayo para la venta de billetes.

El revés para los viajeros aragoneses que tuvieran intención de viajar a la ciudad germana se traduce, en el caso del Gobierno aragonés, en un ahorro económico que, en este caso, será de 200.000 euros al caerse este destino de la parrilla de vuelos del aeropuerto de Zaragoza. Se trata de una factura que afecta por igual a ambas rutas y que, al decidir Volotea no operar la de Múnich, evidentemente, no percibirá dinero alguno por ella.

Este verano, además, estaba llamado a ser el último en el que esta compañía operaba bajo contraprestación económica por parte de la DGA. Un contrato que surge de una adjudicación en 2016 que le ha reportado a la aerolínea 900.000 euros desde 2018. En un contrato que la pandemia ha marcado de forma decisiva y que solo le permitió operar íntegramente en 2018 y 2019. En 2020 y 2021 la actividad cayó en picado por el covid y este 2022 estaba llamado a ser el de la recuperación de la clientela. Pero la ruta con Múnich no lo podrá constatar.

No obstante, la intención de Volotea de dar carpetazo a esta ruta no ha sido una cuestión reciente, ni motivada por cuestiones relacionadas con temas de actualidad como la guerra en Ucrania o el desorbitado incremento de los costes. Ya en enero se puso en contacto con la DGA para apuntar a esta posibilidad que ahora ejecuta, alegando entonces el impacto de la séptima ola del covid-19, cuando a mediados de ese mes estaba alcanzando picos máximos con más de 8.000 contagios diarios nuevos. Ahora se toma la decisión, cuando estos registros han caído de forma notable, un 90% de aquellas cifras.

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Múnich se convierte en la segunda ruta que pierde el aeropuerto de Zaragoza este año, después de que Ryanair decidiera suspender los vuelos con la conexión regular con Lisboa a partir del próximo 25 de marzo. En su caso, Volotea, que opera este vuelo estacional, solo para el verano, lo achaca a la baja demanda, como también ha sucedido con tres de los doce vuelos chárter programados para Semana Santa que finalmente no despegarán de la pista aragonesa.