Los establecimientos hoteleros y turísticos de Teruel y toda su zona de influencia se preparan ya para la llegada de los días grandes de las Fiestas del Ángel que comienzan este viernes. Después de dos años sin festejos, tanto desde el ayuntamiento como los propios propietarios de hostelería esperan que el turismo responda y sea «una buena Vaquilla».

Por el momento, en cuanto a ocupación los datos son buenos y se espera que todos los hoteles y apartamentos puedan colgar el cartel de completo durante la semana. «Para el sábado, que es el día más importante estamos prácticamente al 100%. Los días colindantes aún queda alguna opción pero esperamos que se vayan llenando con los visitantes de última hora», asegura Roche Murciano, presidente de la Asociación Provincial Teruel Empresarios Turísticos.

Aun así, el presidente reconoce que durante los días de las Fiestas del Ángel hay una gran cantidad de público que no invierte en hostelería. «Hay muchos jóvenes entre 18 y 35 años que vienen, están toda la noche sin dormir o duermen en los coches pero que aunque no se quedan en los hoteles, por lo menos sí que consumen y gastan en restauración», añade Murciano.

El concejal de Festejos y Turismo, Javier Domingo, señala que las previsiones son buenas y que es muy probable que se alcancen las cifras de 2019, el último año en el que hubo fiestas.

La alcaldesa de Teruel, Emma Buj, ha asegurado que aunque aún no hay previsiones del número de visitantes que llegará a Teruel estos días, sí que se espera que sean «unas fiestas multitudinarias». «La Vaquilla es una fiesta de reencuentro, de encontrarse con amigos y familia y tanto los turolenses como los visitantes tenemos muchas ganas», ha concluido.