A fondo: La escuela de Caneto y la importancia de la repoblación

Caneto es un ejemplo de repoblación basado en la cohesión vecinal, la autosuficiencia energética y el cuidado de la infancia.

Alumnos en el centro rural de Caneto, en una imagen de archivo.

Alumnos en el centro rural de Caneto, en una imagen de archivo. / SERVICIO ESPECIAL

Eduard Jubert Gómez / Presidente del AMPA de la escuela de Caneto

Este fenómeno, conocido como la España vaciada, plantea preguntas cruciales sobre el futuro de estas áreas y cómo garantizar su desarrollo sostenible. En este contexto, la conexión entre la repoblación, la creación de infraestructuras básicas y el apoyo gubernamental emerge como un enfoque vital para revitalizar estas zonas. Este artículo explora la relación entre estos elementos, con un enfoque particular en la vida rural, escuelas y el papel crucial de las administraciones en el proceso.

Repoblación en la España vaciada

La despoblación rural en España ha llevado a la pérdida de identidad cultural y a la disminución de oportunidades económicas. En respuesta a este desafío, se ha destacado la necesidad de la repoblación como un paso fundamental para revitalizar estas áreas. Plantar una escuela se ha convertido en una estrategia clave para atraer a nuevas familias, especialmente si las líneas pedagógicas son diferentes al método tradicional. La presencia de instituciones educativas no solo ofrece acceso a la educación para los residentes, sino que también actúa como un imán para nuevos habitantes, fomentando así la repoblación.

Planta una escuela y crecerá un pueblo

La conexión intrínseca entre la educación y la repoblación se evidencia en la premisa «planta una escuela y crecerá un pueblo». La presencia de una escuela no solo garantiza el acceso a la educación de calidad, sino que también crea un entorno propicio para el desarrollo comunitario. Las escuelas no solo son centros de aprendizaje, sino también lugares de encuentro para la comunidad, fortaleciendo los lazos sociales y promoviendo un sentido de pertenencia. De ahí la importancia de que cada municipio disponga de su escuela, evitar largos traslados para asistir a ella y que sea del agrado de las familias.

Vida rural en el Pirineo

Un ejemplo destacado de la vida rural en España se encuentra en la majestuosidad de los Pirineos, en Caneto. Un ejemplo de repoblación basado en la cohesión vecinal, la autosuficiencia energética y el cuidado de la infancia. Un atractivo único para gente joven que huye del individualismo social, opta por el contacto con la naturaleza y un ritmo diario adaptado al medio, sin olvidarnos que también podemos caer en el «estrés rural». Es decir, gente muy emprendedora que enseguida busca proyectos de restauración o recuperación de las tierras. Amantes del pasado y del presente que quieren un equilibrio perfecto para su día a día. Si ya eran complicadas las vidas de antaño y lo son las del ahora, solo podemos implorar al estado infraestructuras básicas como agua, luz, internet, vías de comunicación, atención sanitaria y sobre todo escuelas.

Las iniciativas de repoblación y desarrollo rural requieren un apoyo activo por parte de las administraciones. El hecho de no encontrar apoyo sino de poner trabas, puede arruinar la repoblación como ocurre nuestro caso.

Caneto y su escuela Ochinebro

Caneto es una aldea con una población de unas 50 personas y 21 niños. Se ha quedado sin escuela por un problema administrativo. Después de 5 años en el sistema público de enseñanza, la administración ha cerrado nuestra escuela alegando que no cumple con los requisitos administrativos y técnicos para desempeñar un normal desarrollo en la educación.

Esta escuela nació por la necesidad de la repoblación de la aldea de Caneto. Empezamos siendo siete familias las que decidimos en su momento trasladarnos a un entorno rural, reconstruyendo casas derruidas y dotando de los servicios necesarios a la población. De repente, nos encontramos con 18 niños en un ámbito geográfico que imposibilitaba el desplazamiento de nuestros hijos a un centro educativo.

Solicitamos ayuda al ayuntamiento y éste, a manos de la dirección provincial de Educación, decidió abrir un centro educativo en nuestro pueblo para dar continuidad a una exitosa repoblación, como los servicios básicos de agua, la luz e internet ya estaban cubiertos solo faltaba para culminar el éxito una escuela adaptada al medio rural. Con nuestra escuela implementada, se sumaron a este proyecto 6 familias más, teniendo hoy 21 niños entre las edades de 3 a 11 años.

Manifestación, esta semana pasada, de las familias de Caneto.

Manifestación, esta semana pasada, de las familias de Caneto. / SERVICIO ESPECIAL

Para sorpresa de todos, la actual administración decidió cerrar dicha escuela de forma unilateral sin previas conversaciones con las familias ni ayuntamientos para subsanar las irregularidades que achacan. El viernes pasado nos comunicaron el cierre por teléfono del centro educativo al cual correspondemos. El lunes los inspectores de educación vinieron para comunicar al profesorado su traslado laboral a otro centro y el martes nos quedamos sin profesores.

La administración decidió de forma unilateral el traslado de los alumnos al colegio de Tierrantona, un traslado por pistas forestales asfaltadas de más de 45 minutos. Pero por ahora nadie ha venido a buscar a nuestros hijos. Dejándoles fuera del sistema educativo, ya que como padres trabajadores no disponemos de 4 horas de coche para llevar y traer nuestros hijos a otra escuela. Siendo que muchos de nosotros teletrabajamos y tenemos que volver a nuestros hogares para trabajar.

Por otro lado, si se conoce el Pirineo, todos sabemos que en esta época del año las heladas hacen acto de presencia poniendo en riesgo la seguridad de los desplazados. Carreteras con escaso mantenimiento debido a una limitación de recursos de la zona. Ante esta situación, los padres hemos decidido no acudir al centro que nos quieren trasladar, como medida de seguridad y de lucha por los servicios básicos que debe tener un pueblo de estas características.

 Independientemente de que en un futuro nos pongan servicio de transporte, las familias nos hemos organizado para seguir educando a nuestros hijos e hijas. Tenemos la suerte de tener padres con estudios de grados superiores, por lo que siguen acudiendo a su centro para recibir las enseñanzas por nuestra parte a falta de profesores de la administración.

Por ahora nadie se ha puesto en contacto con las familias, por lo que seguiremos movilizándonos por nuestros derechos y los del mundo rural. Apelamos una vez mas al dialogo para encontrar una solución. Si ya es complicado la conciliación familiar ahora además tenemos que conciliarlo con la educación, pero no nos importa, lo hacemos con agrado porque para nosotros nuestros hijos son y serán el centro de nuestras vidas.