Pere Navarro anuncia en Zaragoza que la DGT estudia exigir el uso de airbag en las motos "a lo largo de la legislatura"

La Dirección General de Tráfico (DGT) tiene entre ceja y ceja reducir el aumento de las muertes de motoristas en las carreteras españolas. Y lo va a hacer con medidas concretas y de calado en los próximos años. Así lo ha asegurado su director, Pere Navarro, durante la presentación en Zaragoza de la primera Conferencia Internacional de Seguridad Vial de la moto, que se celebrará durante mañana jueves y el viernes.

Entre los nuevos requerimientos están el uso de airbag en las motos, la obligatoriedad del uso de cascos integrales, guantes homologados en carretera y calzado cerrado, algo que Navarro ha adelantado que se estudia implantar "a lo largo de la legislatura".

Más allá de la implantación de estas medidas, la DGT también busca cambios de mayor calado que pasan por la formación, con cursos de conducción segura o la modificación de los exámenes de conducción de motos que incluirán pruebas en carretera. También se avanza en el ámbito tecnológico, con avances similares a los que se han aplicado en los automóviles.

Detrás de esta línea de actuación están los datos. En los últimos 10 años, las muertes totales por accidentes de tráfico se han reducido, en cambio, los fallecidos en motocicleta han crecido un 37%, pese a que estos últimos conductores solo representan el 3% del volumen de tráfico.

Las muertes: en carretera y durante el fin de semana

Navarro también se ha referido a la infraestructura vial, asegurando que la DGT ha apostado por mejorar las carreteras y la señalización, especialmente en los tramos donde se concentran los accidentes, y ha destacado la incidencia que ha tenido la reducción de la velocidad en las ciudades a 30 km/h como una medida efectiva para calmar el tráfico y prevenir accidentes mortales.

Navarro ha recordado que en España, el 70 % de los fallecidos en motocicleta se producen en carretera y el 30 en ciudad; tres de cada cuatro ocurren en carretera secundaria y el mismo porcentaje en fin de semana, y la mitad de los siniestros son por salida de la vía. Los fallecidos tienen entre 35 y 54 años, con una media de 10 años con el permiso de conducir en moto A, y llevan vehículos de alta cilindrada.

En este sentido ha llamado la atención sobre este tipo de motos de alta cilindrada, vehículos con 200 caballos de potencia y 200 kilos de peso que están hechas "para correr en un circuito" y que en la carretera presentan "un especial peligro".

Comités de expertos

Por su parte, el presidente de la Asociación Nacional de Empresas del Sector de Dos Ruedas (Anesdor), Jordi Bordoy, que ha participado también en la presentanción, ha propuesto la creación de un comité de expertos para clasificar y comprender mejor la casuística y, aunque ha reconocido que "no hay soluciones mágicas" para abordar este problema, ha insistido en que con un análisis profundo se podrán tomar medidas más efectivas.

Bordoy también ha hecho hincapié en la necesidad de renovar el parque de motocicletas, con una antigüedad media de 17 años, porque dificulta que los avances tecnológicos como los sistemas de ayuda a la conducción, sean efectivos porque solo se implantan en los vehículos nuevos.

En cuanto a la infraestructura vial, ha subrayado que se han realizado importantes mejoras pero "aún queda mucho por hacer", tanto en la calidad del asfalto como en la señalización, especialmente en condiciones de poca visibilidad, al tiempo que ha instado a todos los usuarios de la vía, especialmente a coches y camiones, a tener en cuenta la vulnerabilidad de los motociclistas, ciclistas y peatones.

Por su parte, Natalia Chueca, alcaldesa de Zaragoza, ha animado a adoptar "medidas valientes" y ha recordado que el ayuntamiento ya ha avanzado en el uso obligatorio del casco en patinetes eléctricos en el nuevo proyecto de ordenanza de movilidad, una medida que ha aplaudido Pere Navarro, quien ha anunciado que también se implantará en esta legislatura en el resto de España.