El Casademont Zaragoza afronta esta semana previa al choque ante el Unicaja Málaga con el objetivo de pulir errores y volver a la dinámica que le dio hasta dos victorias seguidas. En su último choque ante el Bilbao, los rojillos cayeron derrotados por 67-74 y tanto el técnico de la plantilla, Porfirio Fisac, como los jugadores buscan respuestas a esta pérdida para llegar al duelo de este sábado a las 20.45 horas con la mejor dinámica posible. “Nos hemos olvidado de este partido. Nos tenemos que centrar en el siguiente encuentro y en vencer al Málaga. Creo que vamos en la dirección correcta, aunque en el choque contra el Bilbao fallamos tiros muy claros y fáciles. Este juego es una batalla y lo más importante es olvidarse de esto y centrarse en esta complicada Liga y en este difícil partido”, ha analizado el base polaco Marcel Ponitka.

Asimismo y con la idea de pasar página, el Casademont competirá ante el Unicaja Málaga, que llega tras cinco victorias consecutivas en una pista complicada donde han logrado hasta tres triunfos en los cinco choques ligueros disputados. “Todas las pistas de la ACB son complicadas, especialmente Málaga. Además, es cierto que cada uno de sus jugadores puede ser determinante en distintas fases del juego por lo que será una dura batalla. Debemos estar muy concentrados, ser humildes y lo más importante es jugar como un equipo y mantener nuestro ritmo como lo hicimos en Sevilla”, constata el jugador consciente del potencial de su rival que atesora un quinto puesto registrando seis victorias y tres choques perdidos.

Por otro lado y volviendo a la derrota ante el Bilbao, el base considera que “tuvimos problemas tanto en la mentalidad como en las acciones de juego. Ambos equipos saltamos al campo con bajos porcentajes de puntos y creo que pudimos haber metido muchas más canastas porque tuvimos ocasiones sencillas y liberadas para hacerlo. No nos pudimos encontrar a nosotros mismos y el Bilbao sí. Por eso perdimos”, subraya Ponitka.

Además, es cierto que desde la llegada de Fisac el jugador ha contado con más minutos en la pista. De hecho, en este último encuentro ante Bilbao, el polaco jugó 24.30 minutos, casi el doble de lo que registraba con Schiller con quien jugó entre 9 y 14 minutos minutos como máximo. En cambio, con Porfi, el base ha llegado a disputar entre 11 y 24 minutos, siendo lo normal que se mantenga hasta 20 minutos en activo. “Me siento bien. Porfi sabe tratarnos y cómo funciona esto y él es claro sobre lo que espera de nosotros y lo que quiere ver. Peleo durante la semana para tener este premio en forma de minutos durante los partidos. Fisac nos da mucha confianza en todo lo que hacemos y realmente creo que muchos jugadores hemos mejorado desde su llegada”, ha finalizado el polaco.