El Área de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Huesca está estudiando las estrategias necesarias para evitar las consecuencias negativas de los estorninos y las palomas en el centro de la ciudad.

El alcalde de Huesca, Luis Felipe, remarcó que, entre las iniciativas que se están analizando, se encuentra la de «crear masas verdes» que sirvan «como espacios dormitorio» en el entorno de la ciudad de Huesca. «De esta manera, se podría evitar que estas aves se concentren en los parques dentro de la ciudad, señaló.

La técnico de Infraestructura Verde del Ayuntamiento de Huesca, Ana Pérez, incidió en que el bosque urbano de Huesca es «la masa forestal más potente de toda la comarca, por eso el arbolado de la ciudad soporta durante unos meses estas poblaciones estacionales de aves», añadió.

Desde el consistorio añadieron que si los árboles se sitúan de forma adecuada en torno a los edificios, «pueden reducir la necesidad de aire acondicionado en un 30% y generar un ahorro en calefacción de entre un 20 y un 50%. Por si esto fuera poco, las arboledas funcionan también como pantallas protectoras del ruido del tráfico», argumentaron.