El Periódico de Aragón

El Periódico de Aragón

Guardando las distancias: La vida más allá de los centros

Reivindicar los márgenes también es prestar atención a otros centros de exhibición

Pep Bruno en Peñalba el pasado 6 de julio. ASOCIACIÓN CULTURAL PEÑA DE ALBA

A veces se habla de cifras culturales de una manera que casi todo nos parece una nimiedad. Recortes presupuestarios de 15.000 euros nos da la sensación de que no tienen razón de ser o se les pide a las instituciones que financien tal o cual cosa porque «solo» son 100.000 euros. Evidentemente, con el dinero público hay que ser muy cuidadoso, pero sucede que se ha impuesto esta nimiedad de cifras en un sector muy maltratado en el que no es tan sencillo alcanzar cifras de negocio que entren en el umbral de lo considerado digno.

Pasa que normalmente esos debates de cifras y discusiones suceden en Zaragoza, epicentro para lo bueno y para lo malo de buena parte de la actividad cultural de la comunidad. Pero hay una realidad muy rica en los márgenes, esos que hay que empeñarse en reivindicar y a los que cuesta hacer un hueco informativo muchas veces por desconocimiento. En ese mundo, hablar de ciertas cifras es una quimera, pero no por eso está condenado al ostracismo. Hace dos semanas se celebró en Peñalba (localidad oscense de poco más de 700 habitantes), la Semana Cultural del municipio auspiciada por la Asociación Cultural Peña de Alba (conformada en su inmensa mayoría por mujeres, un dato que no es baladí). Siete días en los que se programaron desde conciertos (la orquesta laudística de la localidad interpretó bandas sonoras de cine) hasta talleres pasando por otras actividades. Visitó la localidad, por ejemplo, la compañía D’Click, que puso en escena su maravilloso espectáculo 'La isla' (si pueden, no se pierdan nada de lo que hace esta compañía en general), y un humorista como Juako Malavirgen fue el encargado de poner el broche de oro a la cita con una actuación en la que, como en él es habitual, también le dio rienda suelta a su guitarra.

Hay una realidad muy rica en los márgenes, esos que hay que empeñarse en reivindicar y a los que cuesta hacer un hueco informativo muchas veces por desconocimiento

decoration

Una programación completa que, además, incluyó la presencia del cuentista Pep Bruno, un referente nacional en la narración oral, que le 'regaló' a Peñalba dos sesiones, una infantil en horario de tarde y una para adultos en la sesión nocturna, ambas con una asistencia nutrida de espectadores. Pep Bruno tiene esa cualidad de conquistar a su audiencia con prácticamente levantar un ojo. Algo que hace que con empezar a contar la primera de sus historias, el público ya no solo esté dentro de la misma sino que esté ansioso por participar. Todavía más en esta ocasión ya que entre historia e historia, el narrador protagonizaba un sinfín de brindis, todos diferentes uno de otro. El espectáculo se titula 'Este cuento vino a mí, vino a mí, vino, a mí'.

Peñalba es solo un caso de que hay muchas maneras de abrazar la cultura fuera de los grandes municipios y ejemplo de que hay mucha vida más allá de los márgenes

decoration

Que una localidad apueste por la cultura no debería ser noticia (aunque a veces lo es), pero sí, más allá de ese debate, debe ser laudable el trabajo que conlleva hacer realidad una Semana Cultural que no está hecha de cualquier manera.

Peñalba es solo un caso de que hay muchas maneras de abrazar la cultura fuera de los grandes municipios y ejemplo de que hay mucha vida más allá de los márgenes, aunque a veces nos empeñemos en sobrealimentar esa burbuja capitalina. Ejemplos culturales en el medio rural hay muchos y muy singulares como el Festival Matarranya Íntim de microteatro por las casas de la comarca o incluso festivales de cine como el de Ascaso y alguno más de reciente creación.

A veces se nos olvida que cuando queremos reivindicar los márgenes, el salirse del carril marcado, eso significa también prestar atención a lugares de exhibición no convencionales y a programaciones con mucho pulmón a pesar de tener que nadar a contracorriente de muchas cosas. Larga vida a la cultura en el mundo rural. 

Compartir el artículo

stats