La dramática cogida de 'El Cordobés' deja el festejo en mano a mano

Tercera de feria: Toros de Salvador Domecq, el primero como sobrero. ‘El Cordobés’ fue cogido en su primero quedando en mano a mano. El Fandi (silencio, silencio tras aviso y vuelta tras petición; Joselito Adame (ovación tras petición, silencio y silencio). Lleno.

Carmelo Moya

La tercera de la feria de La Albahaca en Huesca ha pivotado en torno a la despedida de ese ruedo de Manuel Díaz 'El Cordobés'. Ya por la mañana se le ha rendido un homenaje en el Ayuntamiento y al comenzar el festejo, representantes de las peñas recreativas locales le han entregado una pañoleta en la que figuraban los escudos de cada una de ellas. Una categorización de tal enjundia no se había producido en la capital oscense más que a la figura de Juan Antonio Ruiz 'Espartaco'.

Antes, ya el paseíllo ha resultado atípico pues la formación se ha desconfigurado en varias fases del trayecto al saludar el popular torero, una y otra vez, los cánticos de los clientes de la solanera. Todo parecía encaminado hacia una tarde amable y sin exigencias hasta que ha saltado al ruedo el primer toro, un colorado de escasa encornadura pero muy cerrada.

Grave cogida de El Cordobés en Huesca

El toro, después de ser citado en distintos burladeros por los subalternos para fijarlo se ha cerrado en tablas, barbeándolas muy por adentro y a una considerable velocidad. Incomprensiblemente, 'El Cordobés', también pegado a las maderas, no ha reaccionado, quedándose inmóvil en vez de salirse de tan comprometido terreno. Ha sido arrollado dramática y muy violentamente siendo volteado aparatosamente.

La primera impresión tras el percance resultó que le había dañado la mano izquierda pues tan solo se dolía de esa extremidad. Luego, ya auxiliado por las cuadrillas, se percataron de la herida en el muslo que se ha descubierto en el Triángulo de Scarpa con una extensión de 20 cm. Intervenido en la propia enfermería de la plaza, ha sido derivado al hospital San Jorge de la capital oscense.

Mano a mano entre El Fandi y Joselito Adame

El festejo ha quedado así en un mano a mano entre El Fandi y Joselito Adame. Este último ha tomado el puesto de Cayetano (en paro por una lesión de muñeca) gracias al triunfo del pasado viernes.

El primer toro ha sido devuelto por una evidente falta de fuerzas. Ese ha sido el común denominador de una corrida con el hierro de Salvador Domecq con varios toros camino de los seis años, escasa de cara y alarmantemente inválida. Una colección de escombros que ha apuntado cierta nobleza y gran docilidad, casi ovina. El quinto, al menos, también debería haber sido devuelto. Ñai.

En esas ha afrontado la peña la que sería una tarde insufrible, larguísima (tres horas) pero eso sí, con una banda de música machacona, ilustrando ¡todos, sin excepción! los toros de la feria. Y el pasado viernes no era de pasodobles, la cosa era más bien de réquiem.

Así que El Fandi, rey de los automatismos, calco inquebrantable de sí mismo, aborreciblemente repetitivo ha descargado el número de siempre una, dos, tres veces más. Al primero, recibo de capote de rodillas largando para después capotear por «polvaredas», el tercio de banderillas estándar en versión extendida (han sido tres pares más otro al violín) para luego cercar a un toro de Salvador Domecq que diríamos vivo porque ha estado en pie. Ni medios muletazos. Media y descabello.

Un segundo, un cinqueño con cara de niño y cuerpo de hombre que se ha dejado picar en un solo encuentro lo ha quitado por navarras a la salida del caballo. A falta de aire acondicionado, algo del aleteo del percal ha llegado al tendido. Gracias.

En un momento de su mecánico quehacer ha sido volteado. La sugestión ha empujado algo pero aquello no trascendía. Tampoco en su tercero, otro escombro con dos palmos de lengua afuera, que ha dado más pena que miedo.

Mientras, lo de Joselito Adame ha resultado terriblemente anodino y lineal. Yendo siempre al toro sin un plan, eternizando faenas sin hilo argumental, sumando muchos pocos creyendo que hacen un todo. Y no. Para aquellos que fiscalizan meticulosamente, una serie en el sexto a un Norit moribundo ha dado unas cuantas fotos lustrosas. Y ya.

Coda: por fin se ha instalado la cordura en el palco. El presidente Emilio Latorre se ha aislado del griterío y ha hecho respetar el reglamento con firmeza negando despojos pueblerinos. Usted sí. 

Parte médico de 'El Cordobés'

El diestro Manuel Díaz 'El Cordobés', que ha resultado herido por el primer toro de la corrida que se ha celebrado este sábado en Huesca, ha sido intervenido en la enfermería de la plaza de una cornada en el «Triángulo de Scarpa derecho, con un trayecto superior externo y otro inferior interno de 20 cms, de pronóstico grave».

También sufre «una herida contusa en el segundo dedo de la mano izquierda con una fractura conminuta (en la que el hueso de rompe en dos o más fragmentos) de la falange media, con severo traumatismo en partes blandas y lesión también en la arteria colateral radial y de la polea A2», según recoge el parte médico que firma el doctor Enrique Crespo.