Ya han pasado dos días desde que Fernando Alonso se accidentó en los entrenamientos de pretemporada en Montmeló y poco a poco se van conociendo más detalles del "severo impacto lateral" --en palabras de su mánager, José Luis García Abad-- que el piloto asturiano sufrió contra un muro y que lo han obligado a permanecer ingresado en el Hospital General de Catalunya "hasta que pueda hacer una vida normal".

'La Gazzetta dello Sport' explica en su edición de este martes que los mecánicos de McLaren-Honda lo pasaron realmente mal. "Llamábamos a Fernando, pero desde la radio solo llegaban gemidos extraños y apagados. Después de un último lamento, solo escuchábamos silencio", han explicado al diario italiano. El diario italiano ofrece incluso una detallada reconstrucción.

Flavio Briatore, antiguo jefe de Renault con la que el asturiano se proclamó campeón en el 2005 y el 2006, también ha hablado para la RAI. "Fue un simple accidente. La telemetría demuestra que trató de mantener el coche en la pista. No recuerda lo que ocurrió, pero eso es algo normal. Lo importante es que las pruebas médicas son todas favorables", ha declarado. "No entiendo que se cuenten historias extrañas. Hay veces en que el choque es más espectacular y no sucede nada. Aunque este es el segundo accidente grave de su carrera, el primero fue en el 2003, en Sao Paulo", ha recordado.

La explicación de McLaren

Los responsables del equipo aseguraron el lunes a través de un comunicado que "el viento impredecible y racheado" fue el causante del accidente. Según esta versión oficial, no se debió a fallo mecánico alguno del monoplaza ni tampoco a un desvanecimiento de Alonso, ya que estaba pisando a fondo el pedal del freno, "algo que no podría haber hecho de haber estado inconsciente".

En la nota, se especifica que el coche "se fue largo en la entrada de la curva tres, rápida en subida y a derechas, y pasó por encima de la moqueta de 'astroturf' que marca los límites del trazado" y que "la consecuente pérdida de tracción causó un grado de inestabilidad que devolvió al coche de nuevo a la parte interior del trazado, donde recuperó tracción y le hizo impactar lateralmente contra el muro". "También podemos determinar que no hubo descarga eléctrica alguna o irregularidad de tipo alguno en el ERS (sistema de recuperación de energía cinética), ni antes, ni durante, ni después del incidente", concluye.

El monoplaza chocó "contra la parte interior del muro de hormigón, primero con la rueda delantera derecha y después con la trasera del mismo lado. Tras ese choque inicial, el vehículo "se deslizó pegado al muro unos 15 metros antes de detenerse, las cuatro ruedas permanecieron en el coche y no hubo daños importantes en el chasis o en su estructura". Pero lo que está claro es que hubo "un significativo impacto lateral", reconoce McLaren-Honda.