El Zaragoza tiene hasta el 16 de junio para lograr el 50% de las adhesiones entre sus acreedores

La jueza del Juzgado Mercantil Número 2, María del Carmen Villellas, que lleva el concurso de acreedores del Real Zaragoza ha admitido a trámite la solicitud del club para modificar el actual convenio, por lo que se ha abierto un plazo hasta el próximo 16 de junio para que los acreedores ordinarios se adhieran a esa propuesta, teniendo en cuenta que el club necesita un 50% de las adhesiones para sacar adelante ese cambio. Tras recibir la solicitud, el pasado 12 de marzo, la jueza había dado traslado a los tres administradores concursales, Carlos Terreu, Andrés Jiménez y Jorge Aso, para que dieran su conformidad, algo que ya ha sucedido.

El dictamen de la jueza, al que ha tenido acceso este diario y ha sido adelantado por Media Aragón, establece “admitir a trámite la modificación del convenio del deudor Real Zaragoza, aprobado por sentencia de fecha 09 de mayo de 2012; y modificado el convenio por sentencia de fecha 04 de noviembre de 2016, que no podrá modificarse ni revocarse, sin perjuicio de que el deudor pueda solicitar la liquidación en cualquier momento. Las adhesiones, las revocaciones de las adhesiones o las oposiciones a la propuesta de modificación del convenio se formularán antes del 16 de junio de 2021”, señala el escrito. La deuda total ordinaria del Real Zaragoza asciende a 24,7 millones.

Suspensión en Segunda B

La solicitud pide que los pagos, que debían finalizar en el 2025, se prolonguen de forma lineal hasta el 2030, es decir cinco años más, a razón de 2,47 millones anuales hasta entonces, además de que se suspenderían si el club baja a Segunda B,  por lo que la petición también es un blindaje ante un hipotético descenso, que ahora se ve más lejano que hace solo unos meses, cuando se planteó esta modificación. Del mismo modo, si se sube a Primera, algo que como pronto no sucederá hasta el 2022 ya que esta temporada no se va a lograr, se abonará anualmente y mientras se esté en la élite un 20% más adicional a los acreedores ordinarios hasta acabar con los créditos.

La solicitud se fundamenta en la Ley 3/2020 y tiene su base en los perjuicios derivados de la pandemia. Se trata de la segunda modificación del convenio de acreedores, que se firmó en el 2012 y que ya fue cambiado en el 2016 para variar los años de cumplimiento alterno, que eran cinco, para que fueran fijos y consecutivos y empezar a abonar ese convenio de acreedores en julio del 2018. El Zaragoza ya abonó las dos primeras anualidades, de 1,36 y de 1,679 millones respectivamente en el 2018 y el 2019, pero en la tercera, el año pasado, pidió la suspensión ante el juzgado, que fue concedida.

Oposiciones importantes, pero optimismo

El club ya asume que va a contar con la oposición de algunos de los acreedores importantes, como el Shakhtar Donetsk, al que se le adeudan 4,41 millones en ese convenio ordinario, y casi un millón más como subordinado, o el Milan, con 2,2. Son los dos acreedores principales y aglutinan un 27% de la deuda del convenio. Por el contrario, LaLiga y, en consecuencia los clubs españoles que están en ese concurso (Getafe, Valencia, Betis….), sí se van a adherir y, en principio, también la mayoría de exfutbolistas y agencias de representación, por lo que es muy factible que el club saque el apoyo de ese 50% que necesita, teniendo en cuenta que la primera modificación del convenio la obtuvo con una mayoría cualificada del 66%.

Según concluye el informe de evaluación de los administradores, la solicitud del club se encuentra “prudente y razonable en términos económicos. Si no se producen factores exógenos que impidan el cumplimiento del mismo, el plan de pagos se evalúa como realizable de acuerdo con el plan de viabilidad previsto. Por ello, entendemos que procede la continuación de la tramitación de la propuesta de modificación de convenio presentada por el deudor”, aseguran.