Las personas con una enfermedad incurable y que padezcan mucho dolor y sufrimiento podrán pedir la eutanasia en nuestro país a partir de este mes de junio. España aprobó en marzo una nueva ley que despenaliza esta práctica, y se suma así a la lista de pocos países del mundo que permiten a sus ciudadanos decidir cómo y cuándo poner fin a sus vidas.

Hasta ahora, una persona en España no podía pedir la eutanasia porque no era legal. Cuando alguien ayudaba a morir a un amigo o familiar enfermo, terminaba en manos de la justicia. Uno de los casos más conocidos fue el de Ramón Sampedro, cuya historia se cuenta en la película 'Mar adentro', del director Alejandro Amenábar.

Con la nueva ley, esto ya no volverá a ocurrir. La norma regula tanto la eutanasia, la «administración directa al paciente de una sustancia por parte del profesional sanitario», como el suicidio asistido, que es «la prescripción o suministro al paciente por parte del profesional sanitario de una sustancia que se pueda auto administrar para causar su propia muerte».

Un centenar de casos al año en Aragón

Según José Luis Trasobares, presidente de la Asociación Muerte Digna en Aragón, «morir puede ser para algunas personas algo horrible y tormentoso», y esta ley garantiza su derecho a decidir sobre su propia muerte, al igual que deciden sobre muchos otros aspectos de su vida.

Esto no significa que vaya a haber un aluvión de peticiones. «En los países en los que es legal, solo entre el 2 y el 4% de todos los fallecimientos son por eutanasia», defiende Trasobares. En Aragón, se prevé que podrá haber un centenar de casos cada año

"En los países donde es legal, solo entre el 2 y el 4% de los fallecimientos son por eutanasia"

La nueva ley establece también el proceso y los requisitos para pedir la eutanasia. La persona tendrá que explicar su situación y presentar un informe de su médico. Después otros facultativos con los que el paciente no haya tenido relación elaborarán un segundo informe, y finalmente una comisión en cada comunidad autónoma recibirá las solicitudes y comprobará que se cumplen las condiciones que marca la ley.

¿Qué se entiende por muerte digna?

Esto supone un importante avance en nuestro país en el derecho a la muerte digna, donde la eutanasia es solo una medida más. «La eutanasia y el suicidio asistido es una muerte voluntaria por parte de alguien que no quiere ir más lejos cuando padece una enfermedad incurable como un cáncer o una enfermedad degenerativa, que le provoca mucho tormento, pero con la que puede mantenerse vivo durante varios años», detalla Trasobares.

En cambio, apunta el presidente de la asociación, cuando se habla de muerte digna se incluyen también los cuidados paliativos y la sedación terminal, medidas que ya se aplican en los hospitales a aquellos enfermos a los que les quedan horas o días de vida para que mueran dormidos y tranquilos.

Recogida de firmas para pedir que la eutanasia fuera legal de los familiares de una mujer enferma terminal. EL PERIÓDICO

Para algunas personas, la nueva ley plantea un dilema moral a los profesionales sanitarios, y los cuidados paliativos ya evitan tener que recurrir a la eutanasia. Para Trasobares, «la eutanasia y los cuidados paliativos son algo complementario», ya que «hay gente que desea acabar con su vida en determinadas etapas de su enfermedad y no llegar hasta el final».

Tema tabú en la sociedad y para los jóvenes

El presidente de la asociación aragonesa cree que la muerte es un tema tabú en la sociedad, y que incluso en las universidades se habla muy poco de muerte digna a los futuros médicos. Además, añade, «intervienen otros prejuicios éticos, muchas veces conectados con lo religioso”.

«La muerte está rodeada de misterio. Por ejemplo, a los niños se les oculta, no se les lleva a entierros, se genera una especie de ignorancia que se prolonga a lo largo del tiempo», comenta Trasobares, que recuerda que en Bélgica y Países Bajos está regulada la eutanasia en menores, y niños y jóvenes también pueden solicitarla. 

En Bélgica y Países Bajos la eutanasia está regulada en menores, y niños y jóvenes pueden también solicitarla

Mayor esperanza de vida, menos muerte natural

La nueva ley también se adapta al mundo actual y a los avances en la esperanza de vida y en la medicina. “Hoy en día hay muy pocas enfermedades mortales y muy poca gente se muere de forma natural», indica el portavoz de Muerte Digna.

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La disponibilidad en los hospitales de soportes para respirar, alimentar e hidratar a los enfermos, hace que las personas terminales puedan vivir mucho tiempo, "pero eso no es vida”, asegura el portavoz de Muerte Digna. «En algún momento hay que tomar esa decisión. No es cierto que uno se muera cuando dios quiere. De hecho, hoy en día dios no tiene mucho que ver en esto», concluye.

El 87% de la ciudadanía está a favor de la eutanasia

Según la última encuesta de Metroscopia (2019), el 87% de la población española está a favor de la eutanasia. José Luis Trasobares, de la Asociación Muerte Digna, explica que «el apoyo a la eutanasia aumenta con la edad y es curioso cómo las mujeres de cierta edad que han sido cuidadoras de enfermos son mucho más partidarias de la eutanasia que otros como los jóvenes, que no saben lo terrible y duro que puede ser a veces morirse». Aunque PP y Vox votaron en contra de la nueva ley que regula la eutanasia, todos los sondeos y encuestas realizados demuestran que la inmensa mayoría de la sociedad española está de acuerdo y que se trata de un tema transversal que no depende de ideologías.