El primer ministro turco, Ahmet Davutoglu, ha querido dejar claro este lunes que Turquía no quiere acoger de forma permanente a los cientos de miles derefugiados sirios que han abandonado su país.

"No podemos aceptar un acuerdo sobre la base siguiente: 'Denos usted el dinero y que ellos (los refugiados) se queden en Turquía. Turquía no es un campo de concentración", ha declarado el ministro en una entrevista en televisión.

PROMESA DE MERKEL

Davutoglu reaccionaba así a las declaraciones de la canciller alemana, Angela Merkel, en que esta decía que se iban a reanudar las negociaciones para el ingreso de Turquía en la Unión Europea si el país aceptaba acoger a los refugiados.