Ejea presentó el 12 de marzo en el centro cívico el proyecto Casa Wiljtata, una casa donde renacen las esperanzas, de la Asociación Solidaria Aragonesa (ASA), una de las entidades preceptora de las subvenciones que el consistorio otorga anualmente para el apoyo a proyectos de solidaridad, cooperación al desarrollo y ayuda humanitaria de emergencia. Cada año, Ejea destina 44.900 euros a este tipo de iniciativas.

La asociación desarrolla varios proyectos en el Tercer Mundo, en países como Bolivia; y con Casa Wiljtata pretende implementar un centro de capacitación donde los jóvenes de la Fundación Munasim Kullakita sobrevivientes de trata y tráfico de personas, jóvenes que salen en libertad de las cárceles y que viven en situación de vulnerabilidad causada por el consumo de droga y vida de calle puedan apropiarse de saberes y prácticas que les permitan un futuro con oportunidades de trabajo, recursos económicos e inserción social.

El proyecto se inició en 2018 gracias a una primera convocatoria subvencionada por DPZ.