Llenaron los sillones del salón de plenos y otra veintena de miembros de colectivos sociales se quedaron en el pasillo de la planta noble del ayuntamiento sin poder entrar, con los carteles de protesta en la mano. Reclamaban que el presupuesto municipal para el 2009 que se tenía que votar aumentase un 5% más el IPC previsto las partidas destinadas a subvenciones a entidades sociales y juveniles. El presidente del Consejo de la Juventud, Alberto Alcaine, leyó un manifiesto firmado por 95 entidades en el que instó a los poderes públicos a que apoyar la participación y la consolidación de un tejido asociativo "estable, rico y plural". También intervino en el pleno, el presidente de la Federación de Asociaciones de Barrio de Zaragoza (FABZ), Miguel Ángel Mallén, quien confesó sentirse decepcionado por el presupuesto del 2009. "Ha fracturado al tejido social de la ciudad", dijo. Y confió en que con el plazo de alegaciones que ahora se abre las cuentas puedan mejorar mediante propuestas de grupos. "Sabemos que parte de estos presupuestos servirán para pagar fastos anteriores", lamentó. Las entidades entregaron en el registro general más de 9.000 firmas recogidas en apoyo al manifiesto que firmaron el 15 de enero.