Mientras hay vida hay esperanza. Ese parece ser el lema al que se agarran las empresas aragonesas para afrontar un 2012 plagado de incertidumbres. La confianza en que el rumbo económico cambie, al menos en el segundo semestre del año, parece alimentar las expectativas de negocio, según la Encuesta de Perspectivas Empresariales realizada por la Cámara de Comercio e Industria de Zaragoza. En la misma, las compañías confían en exportar e invertir más que en el 2011, en el que solo el 22% de las empresas aragonesas incrementaron su cifra de negocio, mientras el 58% la vio reducida. El clima empresarial, que sintetiza todos los indicadores, arrojó un saldo aún más negativo, casi al nivel de los inicios de la crisis económica.

Un hecho que provocó que el empleo y la inversión siguieran sufriendo grandes recortes. Según el estudio, los resultados del pasado año son "claros" por una nueva ralentización de la actividad económica, "muy influida por los malos resultados del último trimestre".

OPTIMISMO REALISTA Pero para ello será necesario que fluya el crédito en familias y empresas, según apunta la institución cameral en un comunicado. Esa es, sin duda, una condición sine qua non para que el sector industrial recupere el tono. Si fuera así, se prevé un incremento de las inversiones en el 2012, aunque todo estará sujeto a la evolución de la demanda, tanto interna como externa. En este sentido, según la Cámara, "resulta difícil encontrar buenas expectativas", aunque aparecen "hilos de esperanza" de la mano de la internacionalización y de la inversión de la industria.

Por tanto, para el año que ahora comienza se podría decir que los empresarios prefieren encuadrarse en un optimismo realista, ya que el pesimismo que recoge el clima empresarial es "menos intenso" por la confianza de las empresas en las exportaciones y el apoyo a una internacionalización de las empresas aragonesas, como "decisiva palanca de impulso de la economía" de la comunidad, señala la Cámara.

Esta encuesta recoge la opinión de 302 empresas de Aragón sobre resultados del 2011 y expectativas para el 2012 en cifra de negocio, ventas, empleo inversión y confianza en la evolución de la economía. Además, forma parte de un estudio europeo sobre el clima empresarial, realizado a partir de la opinión de 66.079 empresarios, de los que 6.436 son españoles.