Dos agentes de la Brigada de Seguridad Ciudadana de la Jefatura Superior de Policía de Aragón nunca imaginaron que una rutinaria identificación de un joven iba a acabar con el individuo al que pidieron la documentación en el hospital universitario Miguel Servet de la capital aragonesa. No dudó en tirarse al vacío, desde un segundo piso para evitar ser arrestado.

Los hechos tuvieron lugar a las 16.20 horas cuando los policías, según fuentes consultadas, pararon a este individuo, que responde a la identidad F. A. O. M., para pedirle la documentación. El temor se apoderó del joven que no dudó en salir corriendo y refugiarse en una vivienda situada en la calle María Montessori. Los agentes fueron detrás de él. Al ver que le perseguían e, incluso, que los policías accedían a la vivienda, este hombre no dudó en abrir la ventana y tirarse por ella. Desde un segundo piso.

Tuvo la suerte de caer sobre un coche que le amortiguó la caída, si bien no evitó que resultara lesionado. Mientras los agentes salían a la calle, F. A. O. M., intentó salir corriendo, pero no pudo. Allí mismo le detuvieron, pudiendo descubrir en ese momento, según fuentes policiales, que sobre este joven de origen colombiano pesaban dos órdenes de busca y captura, así como otra de expulsión del país. Inmediatamente fue trasladado al hospital Miguel Servet de la capital aragonesa, donde quedó ingresado en observación.

Por suerte para este joven su huida no acabó en tragedia, como ocurrió en septiembre del año pasado. En aquella ocasión, un joven de 26 años falleció en el hospital Miguel Servet a consecuencia de los traumatismos sufridos al precipitarse desde un tejado cuando intentaba huir de la Policía Nacional.

Los hechos se produjeron en el Casco Histórico, donde la víctima y otros tres hombres trataban de ocultarse tras perpetrar un robo con violencia en el entorno de la calle de Conde Aranda. Un vecino dio la voz de aviso.