POR

ADRIANA OLIVEROS

Para grandes, pequeños, gordos, guapos y bajitos. Arte didáctico y amateur para todos los públicos es el que se inauguró ayer en el Centro Cultural de Ibercaja del Actur en Zaragoza, que celebrará su fin de curso plástico, con una muestra de 168 cuadros de algunos de sus 267 alumnos. El jefe de Cultura de la caja, José Luis Lasala, y la directora del centro, Marisa Borao, se subieron a un improvisado escenario para inaugurar la muestra. Y lo hicieron con una representación de alumnado, gracias a la presencia del veterano Guillermo Dorda y del joven Jaime Pérez, y parte del equipo docente (Juan Baldellou, Eusebio Gracia, Iñaki y Cristina Hernández). Porque otros profes como Pepe Cerdá estaban inaugurando en Francia. Y Natalio Bayo, como Lobatón, quién sabe dónde. Dado el gong y los discursos iniciales se sumergió la tarde en el chinchín y el canapé. Y ahí estaban desde algunos alumnos con solera, como las charos Ibáñez y Zugazagoitia y el propio Dorda, que a estas alturas deben pintar como Velázquez; hasta algunos de los más peques de ocho años (Rocío Domínguez, Ignacio Cuiral, María Farjas...). No faltaron a la cita la vicepresidenta de la Asociación de Acuarelistas, Asun Proaño, y parte de sus socios (José Antonio de la Concepción, Pilar Jovani, Florentino Gutiérrez, las hermanas Lahoza...), que han participado en cursos especializados. Todo el batiburrillo en una muestra megamix de estilos varios, desde el pop hasta una visión de Jaca plasmada al estilo Turner, al que se dedicó uno de los monográficos. La muestra seguirá abierta hasta el 30 de junio, de 19 a 21 horas. La entrada es libre para ver a las jóvenes promesas. O para apuntarse el año que viene a darle al pincel.