Cientos de zaragozanos se "comieron" ayer por la mañana pequeños trozos de tubería del trasvase del Ebro . Chunta Aragonesista de Zaragoza (CHA) repartió seis kilos de barquillos de chocolate entre los cientos de ciudadanos que, a partir de las 12.30 horas, se acercaron hasta la plaza del Pilar.

Con este simbólico acto fue como los militantes de Chunta y los zaragozanos que allí se congregaron celebraron el éxito de la tensión reivindicativa que se ha mantenido contra el Plan Hidrológico Nacional durante los tres últimos años en la comunidad aragonesa.

Los aragonesistas también aprovecharon la jornada de ayer para hacer hincapié en la necesidad de "permanecer atentos a las decisiones que adopte el nuevo Gobierno español, para exigirle que cumpla con los compromisos adquiridos a favor de la nueva cultura del agua".

El concepto de autogobierno fue la segunda idea que los miembros de CHA subrayaron en este acto, que estuvo marcado por la desaparición de la amenaza del trasvase para la comunidad. En este sentido, fuentes del partido nacionalista echaron en falta una mayor participación por parte de los ciudadanos.

"Muchas personas se han animado a ´comerse´ las tuberías, pero ha habido bastante menos participación que en años anteriores. La gente debería haber celebrado más el freno del trasvase y reivindicar otros asuntos como el autogobierno para Aragón", manifestaron fuentes del partido. Y es que como se leía en el manifiesto realizado por CHA, para este partido, "esta legislatura debe de ser la de la reforma del Estatuto de Autonomía de Aragón".

OPINIONES DIVERSAS Entre los ciudadanos que se acercaron a mediodía hasta la entrada de la puerta de la Oficina de Información y Turismo de la plaza del Pilar --punto en el que CHA procedió al reparto de los barquillos--, las opiniones eran muchas y muy diversas.

"Este año hemos dado una tregua al Gobierno", comentó Joaquín Berne. "Pero, aunque hoy haya un ambiente más festivo, no podemos bajar la guardia. En nuestra comunidad quedan muchas cosas por hacer y en los próximos años debemos recuperar otras reivindicaciones", precisó Berne.

Una postura similar mantenía María Victoria Cerezuela, que estaba acompañada de su hija y su nieta. "Hay que darle tiempo al nuevo Gobierno, pero el año que viene volveremos a pelear", sentenció Cerezuela, quien aseguró que todos los años se acerca hasta la plaza del Pilar en el Día de San Jorge. Su hija, en cambio, acusó a los políticos de la escasa participación ciudadana: "El trasvase movía a la gente pero en esta ocasión los políticos no han organizado nada".

Para Félix Borque, ayer sólo había lugar para la fiesta: "Como ya no hay trasvase, ahora nos toca disfrutar". Sin embargo, también hubo quien, como María Mayor, echaron en falta actos de protesta. "Teníamos que haber aprovechado esta ocasión para protestar contra muchas otras cosas. Lo del trasvase está muy bien, pero Aragón no es sólo eso y parece que nunca nos movemos por nada más", declaró.