La Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) ha comenzado esta semana unas actuaciones de emergencia por las crecidas extraordinarias de abril que combinan trabajos de reparación con experiencias piloto o propuestas novedosas para ampliar el espacio fluvial o permeabilización de sedimentos para incrementar la seguridad en núcleos ribereños.

Entre Monzalbarba y Alfocea se van a combinar distintas tipologías de intervención, todas ellas planteadas con el menor impacto posible, dadas las figuras de protección de gran parte del eje del Ebro, pero asumiendo el objetivo no solo de reparar, sino de reducir la exposición de estos núcleos que se vieron dañados por inundaciones en el episodio de la pasada primavera.

Junto con la reparación y refuerzo de las infraestructuras defensivas, se plantea el retranqueo de motas, generando una ampliación de la llanura de inundación y el espacio fluvial y la creación de un área de inundabilidad temporal libre sobre la margen izquierda del Ebro en Alfocea.

cauces de alivio / También se está probando la aplicación de la técnica del curage para permeabilizar masas de sedimentos consolidados por la vegetación en los parajes de Santa Catalina y Soto de Alfocea, especialmente bajo el puente de acceso al municipio (ojos próximos a la margen izquierda) y en los tramos inmediatamente aguas arriba y aguas abajo para dar continuidad a los caudales fluyentes.

Esta modalidad de impermealización también se aplicará en Los Campiños, en Boquiñeni, en la margen derecha del río Ebro. La CHE ya ha apostado por esta tipología este mismo año en Alfaro (La Rioja) y en San Adrián (Navarra) y se han planteado otras doce más en Aragón.

En otros puntos, la CHE está planteando diferentes acciones teniendo en cuenta la realidad de cada núcleo: instalación de compuertas, áreas de inundabilidad, cauces de alivio, retranqueo de motas o permeabilización de infraestructuras.

Estas medidas para incrementar el espacio fluvial ya se recogen en el proyecto LIFE Ebro Resilience, con las medidas para minorar efectos de las inundaciones desde Logroño hasta La Zaida o de dos proyectos integrados en el plan de impulso al medio ambiente para la adaptación al cambio climático (PIMA Adapta), así como en otros documentos firmados por municipios ribereños y organizaciones ecologistas.

restaurar los ecosistemas / Algunos de estos proyectos novedosos también tienen que ver con la reconexión de los meandros del Arga en Funes (Navarra), considerada una de las restauraciones fluviales más importantes de Europa y el proyecto actualmente en trámite ambiental de recuperación de ecosistemas fluviales y el proyecto de restauración fluvial del Ebro entre Alfaro y Milagro.

Todos ellos responden al objetivo de minorar las afecciones por inundación, pero sumado a la recuperación de hábitats.