La «avalancha» de demandas por cuestiones relacionadas con las hipotecas que motivaron la creación de los juzgados especializados en condiciones generales, llamados de cláusulas suelo, han hecho que por primera vez en ocho años los juzgados aragoneses, a nivel general, ingresaran más asuntos de los que resolvieron el año pasado, y haya aumentado un 15% el número de asuntos pendientes al finalizar el año, hasta alcanzar los 45.713. El plan del Poder Judicial y el Ministerio de Justicia de «encapsular» el problema ha funcionado a medias para no saturar toda la jurisdicción civil, pero ha colapsado por completo estos órganos.

Así lo constató ayer el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Aragon (TSJA), Manuel Bellido, al presentar en la Comisión Institucional de las Cortes la memoria judicial del 2017.

Bellido, en grandes cifras, destacó el aumento de un 6% en los asuntos ingresados, (de 143.000 a 151.000, en números redondos) con una resolución prácticamente estable (en torno a 146.000), que ha aumentado la pendencia en el citado 15%. Por contra, jurisdicciones como lo Penal (delitos), Contencioso (reclamaciones a la Administración) o lo Social (trabajo), se mantienen estables.

ESTRUCTURAS / Pese a advertir del colapso, Bellido confió en que, con la incorporación desde este mes de tres jueces a tiempo completo (y una de Calamocha, a tiempo parcial) en Zaragoza, la situación mejore, y permita además liberar a Jueces de Adscripción Territorial (JAT) para otros menesteres.

Aun así, consideró fundamental la creación de otro Juzgado de Primera Instancia en Zaragoza (junto al que entrará en funcionamiento este año), para paliar colapsos como el de Familia, cuyos jueces tienen una ratio superior a una sentencia al día (662 al año), con casos complejos.

Yendo más allá, Bellido apostó por un «pacto de Estado» para dotar al sistema judicial de «más flexibilidad», de forma que los servicios comunitarios de funcionarios puedan trasvasarse a la jurisdicción que sufra la mayor carga de trabajo en un momento determinado. Esto es, en gran medida, lo que propone la Nueva Oficina Judicial (NOJ), que nunca se implanta, como afeó en este caso el PP, en la oposición.

Bellido también pidió a la DGA que la informatización de la Justicia, ahora con el sistema Avantius que comienza a implantarse en Zaragoza. Pidió a la DGA más formación, asistencia técnica y paciencia para la coexistencia con el papel.