La Asociación de Usuarios de Servicios Bancarios (Ausbanc Consumo) denunció ayer en Zaragoza que "la totalidad de los concesionarios de automóviles incluyen cláusulas abusivas en sus contratos de compraventa".

Ausbanc sostiene que las cláusulas irregulares se refieren a los plazos de entrega, al precio del automóvil y a las indemnizaciones a que debe hacer frente el comprador si renuncia a la adquisición.

Además, la organización de consumidores ha detectado que los concesionarios son reacios a entregar copias de sus contratos e incluso el certificado de garantía del vehículo, una práctica que, en su opinión, tiene como objetivo evitar que el posible comprador pueda analizarlos antes de la formalización definitiva.

"En 100% de las las cláusulas de los contratos que se firman a la hora de comprar un coche o cualquier otro vehículo favorecen al vendedor a costa de penalizar los derechos del consumidor", señaló ayer en una rueda de prensa Alberto Cardona, delegado de Ausbanc en Aragón.

"Uno de los abusos más extendidos --señaló-- es que, en el caso de rescisión del contrato por una subida imprevista del precio final, el comprador pierde normalmente la cantidad entregada a cuenta, que puede ir desde los 600 hasta los 1.200 euros".

Otra de las "ilegalidades" detectadas es el posible aumento del precio del vehículo después de que el comprador se haya comprometido legalmente a abonar la cantidad inicialmente fijada.

Ausbanc afirma asimismo que, "así como el plazo de entrega del vehículo depende únicamente de la voluntad del concesionario, en cambio, el comprador se ve obligado a retirarlo en un plazo muy exiguo.

Para poner fin a las "cláusulas abusivas", Ausbanc instará "en una primera fase, a los organismos públicos y al sector del automóvil a cumplir los derechos de los consumidores". "Si no se corrigen las irregularidades, se podría llegar a plantear una demanda de carácter colectivo", advirtió Alberto Cardona.