La Policía Local de Zaragoza ha cerrado la campaña especial de vigilancia de tráfico de Navidad con la realización de 6.417 pruebas de alcoholemia, de las que 152 fueron positivas, lo que supone una notable reducción respecto al pasado año.

Los 6.417 controles, un 151 por ciento más que en 2013 y que se han realizado entre el 9 de diciembre y el 6 de enero, han arrojado un descenso en 2,5 puntos porcentuales de positivos respecto al año pasado, ha informado el Ayuntamiento de Zaragoza.

Los resultados obtenidos en la pasada campaña de Navidad van "en el camino adecuado", según fuentes de la Policía Local.

De esta manera, de las 152 pruebas positivas que se han producido, un total de 108 (un 1,68 por ciento de las realizadas), han sido administrativas, es decir, se trata de situaciones en las que se han detectado niveles de alcohol por debajo de los 0,60 miligramos por litro de aire espirado y son objeto de sanción económica y de retirada de puntos del carné de conducir.

El año pasado, los positivos administrativos fueron 85 y representaron un 3,32 por ciento de las pruebas.

Además, se han obtenido 44 positivos penales (0,70 por ciento), que suponen detención y juicio rápido, frente al 1,8 por ciento consignado el año pasado, que se correspondía con 48 pruebas.

También se realizaron 17 test de drogas de los que 15 dieron positivo.

La Policía de Zaragoza ha realizado un esfuerzo suplementario para aumentar los controles, convencida de que su presencia en las calles de la ciudad tiene un componente disuasorio y propicia la reflexión de muchos conductores que deciden evitar la conducción después de tomar bebidas con graduación alcohólica.

Precisamente, los estudios de seguridad vial indican que el alcohol está presente en un tercio de los accidentes mortales que se producen en España,

Un factor, el del alcohol, que multiplica por nueve el riesgo de sufrir un accidente, ya que, a medida que aumenta la presencia de alcohol en sangre, se reduce nuestra capacidad de atención y de reacción, además de favorecer conductas de riesgo y agresivas al volante.

La campaña de control de Navidad es una práctica habitual para la Policía de Zaragoza, que cada año difunde previamente, y que pretende que haya un profundo cambio de hábitos entre los ciudadanos, de tal manera que cada vez sean más los que desistan de conducir tras la ingesta de bebidas alcohólicas.